Redacción ‘MS’- Durante el mes de marzo se ha celebrado la ‘IX Maison Lancôme‘, donde la prestigiosa marca ha abierto la Maison al público por primera vez con una finalidad solidaria. Hasta 300 personas han podido acceder a ella para gozar de una auténtica experiencia de felicidad, palpable en cada una de sus estancias. Por un importe de 10€ la entrada, destinado a Plan Internacional, el objetivo es luchar contra el iletrismo funcional en mujeres jóvenes Write Her Future. Por su parte, Lancôme ha donado otros 10€ por cada 10 recaudados.
«El propósito de Lancôme es hacer a las mujeres más bellas haciéndolas más felices. La felicidad está en el ADN de nuestra marca».
Baptiste Beau, director general de Lancôme en España.
Para Lancôme, el concepto de felicidad se ha transformado en los últimos años, tal cual se recoge en un reciente estudio sobre esta materia llevado a cano por la marca, el cual revela que la felicidad se reinterpreta y hoy es una cuestión menos normativa, más libre, plural, interna y experiencial.
En esta nueva felicidad, como sostiene la firma, tiene mucha presencia la belleza:
«El concepto de belleza y felicidad ha cambiado. La mujer de hoy en día no se cuida para gustar, sino para gustarse».
Baptiste Beau, director general de Lancôme en España.
De ahí que, según el mencionado estudio, siete de cada diez españolas opinan que la felicidad se resume en un concepto: cuidarse. Durante ocho décadas, Lancôme ha ofrecido a las mujeres el tipo de belleza más buscado, la que hace resaltar la propia personalidad, la que las convierte en únicas. Y como el 80% de las mujeres declara que la belleza está directamente relacionada con la felicidad, la firma decidió que este año, todos los invitados a su Maison se convirtieran en embajadores de la felicidad, con una única misión que mantiene desde hace más de ochenta años: hacer a las mujeres más bellas, haciéndolas más felices.
Como el 80% de las mujeres declara que la belleza está directamente relacionada con la felicidad, la firma decidió que este año, todos los invitados a su Maison se convirtieran en embajadores de la felicidad, con una única misión que mantiene desde hace más de ochenta años: hacer a las mujeres más bellas, haciéndolas más felices.
IX Edición de la Maison Lancôme
El punto de partida fue un café de bienvenida en el Café Bonheur, espacio inspirado en un bistro parisino donde disfrutar de un primer micro-momento antes de descubrir, estancia a estancia, la Maison Lancôme.
A continuación, la sala Hapiness, donde los invitados, embajadores de la felicidad, pudieron sentir que viajaban directamente a París y que, a los pies de la Torre Eiffel, vivieron un micro-momento de felicidad bajo una lluvia de pétalos de color rosa. En este espacio se inspiraron las diferentes animaciones que se pudieron disfrutar en algunos puntos de venta durante el pasado mes de marzo.
Después, en la sala de cine, Lancôme desveló todas sus novedades en filosofía de marca, lanzamientos estratégicos, nuevas embajadoras…
Tras esta pantalla, se encuontraba un espacio escondido: la mesa interactiva sobre la cual se proyectó la lección de maquillaje definitiva. Liderada por la bloguera Patry Jordán, con más de 13 millones de suscriptores (sumando todos sus canales de Youtube), consistió en un tutorial ‘on demand’ creado a partir de las dudas más frecuentes que las mujeres consultan por Google, detectadas por Lancôme a través de una investigación llevada a cabo a lo largo del año pasado.
Al salir de esa sala, los invitados pudieron seguir viviendo experiencias vinculadas a la belleza y la felicidad en salas de maquillaje, tratamiento y perfume, para terminar en la Sala Hapiness, donde acaba la visita y se brindaba por la felicidad.
