Soledad Moro (Firetecnia): «No hay nada que no puedas hacer. Al final, es una cuestión de amor propio»

La Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid, ASEME, colabora en esta sección con ‘Muy Segura’ con el objetivo de dar a conocer a nuestra audiencia los diversos y valiosos perfiles de sus empresarias que constituyen, sin duda, un claro ejemplo para tod@s nosotr@s.

Este mes entrevistamos a Soledad Moro, directora general de Firetecnia, Protección contra incendios.

¿Puede hablarnos de la creación de su empresa, FIRETECNIA?

Con 25 años comienzo mi andadura empresarial.. Inicialmente éramos tres socios; al cabo del primer año cayó uno de ellos y continuamos los otros dos. 13 años más tarde, por diferencias en tipo de gestión empresarial, la compañía se termina cerrando y yo continúo en solitario con FIRETECNIA

Con toda esta experiencia acumulada, tanto en la primera empresa como en Firetecnia, ¿qué momentos o etapas profesionales destacaría como hitos para usted?

Creo que hay cinco hitos importantes para todo el desarrollo. Hay algunos que no tienen nada que ver con la actividad profesional, pero sí con mi forma de plasmar la manera de dirigir la empresa o de enfocarme dentro del sector.

El primero de ellos fue salir a la calle, es decir, cuando creas tu empresa como emprendedora, dispones de un gran entusiasmo y conocimiento de producto…. pero tienes que buscar clientes. Durante casi un año, lo pasé muy mal, me reforzó muchísimo el comenzar a hacer labor comercial y el contacto con las personas. Parece algo muy obvio, pero no todo el mundo es capaz de saber vender; durante ese año aprendí a vender, a vender mi producto y a vender empresa. El concepto de hacia donde quería llevar la empresa estaba claro, pero como venderlo era mi gran piedra angular. Me supuso una tensión   muy importante, los nervios me vencían. Me hizo experimentar un cambio, ya no solamente en el campo profesional, sino también en el personal; aprendes muchísimo cuando estás en contacto permanente con la gente, sobre todo desarrollas una gran capacidad de escucha.

«Puedes ser un buen profesional desarrollando tu negocio, pero si no sabes vender, estas abocado al fracaso, tu eres quien vende tu proyecto, de ahí en adelante el resto ejecuta».

El segundo hito fue el primer cierre de la empresa, cuando no llegamos a acuerdos societarios con la de origen. Pensé que el mundo se me venía encima. Al final como siempre que caes, te levantas, te sacudes y continúas, incluso refuerzas tus fortalezas y sigues avanzando.  Te apoyas en la gente que te quiere y que te ayuda con pequeños detalles como puede ser una canción…  (TAXI-¡TU OPORTUNIDAD!), todo vale cuando se trata de impulsar!

El tercero fue cuando decidí tener hijos. Era un paso importante porque en ese momento estaba al máximo, esos días de 25 horas que nunca son suficientes, y además hijos que demandan tu atención y tu tiempo, es aquí donde la capacidad de reflexión y tu orden de prioridades dan paso a tu madurez, a tu asentamiento, a diferenciar el valor de cada cosa. Siempre tienes que ir dando pasos hacia delante y ver qué es lo que has que cambiar para la nueva etapa que decides acometer. recoges un poco, piensas, te reúnes contigo mismo y adaptas tu día a día. Hay días en los que estás en el pico de la cumbre más alto y estás feliz, y otros en los que estás recogiendo tus cenizas. Pero siempre vas aprendiendo. Ha sido sin duda una de mis mejores decisiones, ahora tengo dos puntos de apoyo incondicionales, ¡ellos son mi mejor proyecto!  

La cuarta fase fue un momento glorioso después de todo el trabajo que estuve desarrollando: me concedieron el Premio Empresaria en el año 2017. No he sabido publicitarlo de la forma adecuada para que profesionalmente me sirviese de ayuda, pero, personalmente me ha impulsado y motivado. Me he dado cuenta de que este tipo de premios te dan un ‘subidón’. Esta claro que son buenos para visibilizar tu negocio entre otras cosas, pero la parte emocional que te llevas con ello no tiene precio. Animo a que la gente se presente con sus candidaturas, porque es bonito el desarrollo que haces   para presentarte; si, además lo logras, ¡¡mucho mejor!!  Lo bonito de estos premios es que no solo están quienes lo reciben, sino que detrás hay un gran número de profesionales que se dejan la piel para hacer visibles el trabajo de empresas y empresari@s para ayudar a que se continúe generando riqueza y empleo en nuestro país.

«La cuarta fase fue un momento glorioso después de todo el trabajo que estuve desarrollando: me concedieron el Premio Empresaria en el año 2017».

El último hito que estoy atravesando, se debe a la situación del mercado cada vez  más cambiante y nuestro desarrollo para tener capacidad de adaptación. El año pasado atravesé una situación muy dura empresarialmente hablando, desde la calma y el “buen hacer” he conseguido sacarla adelante y reforzarla. Todo dio un giro espectacular. De lo que estaba orgullosa y era mi bandera, de la gente y el equipo con él que había conseguido salir adelante, a finales del pasado año recibo la noticia de que, pierdo una buena parte del equipo técnico porque deciden montar empresa propia. Duro golpe para encajar también con nuestros clientes puesto que a lo largo de los años nos hemos especializado en mercados complejos que requieren de atención muy específica, y a los cuales les cuesta cambiar cuando hay algo que ya funciona.

El primer semestre de este año ha sido búsqueda de personal, ardua tarea al tener además cambios de Normativa que nos obliga a disponer de personal cualificado cuando sin embargo no hay aún especialidad que regule dicha formación. Los sinsentidos de nuestras Leyes. Cada sector tiene sus pros y sus contras. Ahora que hemos conseguido equilibrar de nuevo la plantilla, me siento para analizar y saco lo bueno, he pasado un año que me ha hecho reflexionar y tomar muchas decisiones. Ahora equilibro mis semanas, las hago más cortas y me tomo períodos de descanso, porque me ayuda a pensar mejor.

«El año pasado atravesé una situación muy dura empresarialmente hablando, desde la calma y el “buen hacer” he conseguido sacarla adelante y reforzarla».

Esa es una postura muy inteligente. Imagino que no es nada fácil salir reforzada de una situación como la que usted atravesó…

No es nada fácil. Viene muy bien para la dieta (risas). Es muy duro, estamos en un sector complicado. Tenemos que formar a nuestra gente, aún a sabiendas que pueden emplearlo fuera de la empresa para nosotros en mucho más caro tener gente sin formar.

No obstante, yo animo a la gente a que monte empresas, ahí está la calle.

«Tenemos que formar a nuestra gente, aún a sabiendas que pueden emplearlo fuera de la empresa para nosotros en mucho más caro tener gente sin formar».

Creo que en todos los negocios y trabajos que desarrollas, siempre tienes esa montaña rusa: unas veces estás arriba y otras abajo. Nosotras como mujeres, además, le añadimos un componente emocional, no siempre estamos con el mismo equilibrio, sino que experimentas todo tipo de fases, yo estoy ya casi en los 50, me siento fenomenal aunque a veces mi mente va por una lado y mi cuerpo va por otro.. El trabajo diario ya nos obliga a tener múltiples factores que controlar, y a saber en qué otros casos no es posible hacerlo. El ir controlando tu propia gestión emocional, más la gestión del tiempo y todas las gestiones que necesitas para poder sacar adelante tu trabajo, tu familia, mientras te vienen estas adversidades, es lo que te va haciendo madurar. Y no es una tarea fácil; de ahí que, de vez en cuando, demos un pasito para atrás para pensar y recapacitar.

«El ir controlando tu propia gestión emocional, más la gestión del tiempo y todas las gestiones que necesitas para poder sacar adelante tu trabajo mientras te vienen estas adversidades, es lo que te va haciendo madurar».

¿Qué papel juega su familia en todo este proceso?

Me apoyo muchísimo en mis hijos. Primero, tiras hacia delante por ti misma, pero, cuando los miras, ves que, ellos tienen en ti un referente, y esto es el mayor de los impulsos. Como educador hay que inculcarles que en lo difícil es donde realmente se  aprende, que lo bueno todos sabemos aprovecharlo.

¿Cómo han evolucionado sus responsabilidades dentro de Firetecnia?¿Cuáles son sus principales retos en la actualidad?

Las responsabilidades siempre son las mismas, lo que evoluciona es la forma de acometerlas en un mercado cambiante y evolutivo. Cuando comienzo con la empresa, la responsabilidad es la que todo empresario emprendedor tiene: la de sacar adelante un proyecto. Es la misma que te obliga a irte formando en los diferentes ámbitos para poder consolidar la empresa. Una cosa es emprender y salir adelante con un negocio, y otra cosa es crear una empresa, consolidarla, hacerla crecer… Ahí te vas metiendo en diferentes estadios de formación, en diferentes responsabilidades , no solamente hacia   ti y a tu labor, sino a la de tu equipo, a las necesidades del mercado.

«Una cosa es emprender y salir adelante con un negocio, y otra cosa es crear una empresa, consolidarla, hacerla crecer…».

Comencé en el sector de la PROTECCION CONTRA INCENDIOS ,  el mayor reto es  consolidar adecuadamente este area, que es donde nos movemos desde hace 25 años: proyectos, instalaciones, mantenimientos, etc. Y crecer en otras áreas como integradores, en la actualidad a través de ROBOT MOBILE (robótica colaborativa) que se encuentra en plena expansión.

Se ha introducido, por lo tanto, en un sector puntero como es la Robótica…

Efectivamente. Ambos negocios no están vinculados, aunque el cliente final te demanda tanto una cosa como la otra. Aquí hablamos de clientes de una tipología diferente, porque nos vamos a algo muy concreto, que suele ser la intra-logística. Entonces, el reto es formarte para  salir al mercado  y vender tu producto, pero con nuevas tecnologías. Y esto sí que cambia.

En estos últimos años, además de tratar de consolidar lo que ya había, estamos entrando en un mundo totalmente desconocido. ¡¡Es súper apasionante, es como volver a rescatar esa gran energía y enamorarte nuevamente de tu proyecto!!

«El reto es formarte para  salir al mercado  y vender tu producto, pero con nuevas tecnologías. Y esto sí que cambia».

Nuestro querido Amancio Ortega comenzó con ropa e introdujo complementos, calzado, bolsos, bisutería, perfumes…. Todo ello para el mismo público que ya tenía y captar más nuevo.

Ciertamente, es un bonito proyecto que va por su propio camino y requerirá ir teniendo una nueva cartera de clientes…

Con el paso de los años, tú misma te infundes seguridad. No es lo mismo cuando empiezas los primeros años, que cuando ya llevas mucho y te das cuenta de que lo que parecía tan difícil, no deja de ser una parte más de tu día a día. Como todos los cambios exigen tiempo de adaptación, pero cada vez menos.

El reto ahora es conseguir para el próximo año impulsar toda la parte de robot mobile.. Efectivamente, la gente dice que los robots están desplazando a las personas cuando lo que se va a precisar es que esas personas dispongan de una formación diferente porque hay oficios y profesiones que resultan tediosas para el ser humano. En realidad lo que se crea es un nuevo mercado que  te da opción a tener otro tipo de profesión u oficio relacionado con ello.

«El reto ahora es conseguir para el próximo año impulsar toda la parte de robot mobile».

¿Se refiere a nuevas profesiones?

Efectivamente, como cada cambio abre puertas a nuevas oportunidades, ¡¡¡en época de crisis unos lloran y otros venden cleanex!!!

Al presentar este tipo de tecnologías, lo que estás generando es otro tipo de puestos de trabajo, que habrá que saber desarrollar. Lo vemos en la formación que se imparte en los colegios y en las nuevas carreras . Estamos evolucionando como se ha hecho siempre. ¿Más rápido ahora? Pues tampoco es tan rápido, no nos damos cuenta pero, desde que hay algo que nos llama muchísimo la atención, hasta que realmente se desarrolla, pasan años. Esto no es de hoy para mañana.

«Al presentar este tipo de tecnologías, lo que estás generando es otro tipo de puestos de trabajo, que habrá que saber desarrollar».

No obstante, ahí fuera nos están ‘vendiendo’ la inmediatez con la que suceden los cambios…

La inmediatez ya te tiene relativamente preparado. Muchas veces decimos: madre mía, van a venir los robots; pero sí es que ya tenemos prácticamente todo preparado. Por ejemplo, la tecnología de reconocimiento facial, que también la estamos integrando; la gente lo ve como algo muy revolucionario cuando, sin embargo, ya está abriendo su móvil con esta tecnología, ya está siendo “dirigido” para realizar compras a través de la lectura de su lenguaje corporal, etc. Lo que sucede es que, en nuestro día no estamos prestando atención a lo que recibimos.

Lo mismo sucede con los niños pequeños ahora, que los vemos con cualquier Tablet o teléfono manejando las pantallas con absoluta normalidad desde que tienen meses. Para ellos no habrá transformación porque nacieron en ella. De todos modos, sólo debemos observar a nuestros mayores manejando los dispositivos con cierta soltura, aunque siempre con la frase de “que mal me apaño con esto”.

«Muchas veces decimos: madre mía, van a venir los robots; pero sí es que ya tenemos prácticamente todo preparado. Por ejemplo, la tecnología de reconocimiento facial».

Así es. Son los nativos digitales, los que menos notan este cambio…

Nosotros sí que lo notamos, porque venimos de una generación que aún ha combinado el analógico con el digital. Nosotros estamos asistiendo a esta época de la transformación, somos los que hemos tenido que dar un paso de un lado a otro, y hemos vivido los dos. En cualquier caso, a mí me siguen gustando los libros en papel. Esto demuestra que no hay nada que no puedas hacer; al final, es una cuestión de amor propio, las tecnologías son cada vez mas intuitivas.

Y en el ámbito empresarial sucede igual: el pasar de un sector a otro significa que tienes la capacidad de gestionar personas y que tienes una visión amplia. Soy una persona que ‘desbordo’, que ‘agoto’. Me refiero a mi nivel de inquietud y actividad, pero que también lleva aparejado un alto nivel de exigencia conmigo misma que hace que los demás traten de estar permanentemente en esa posición.

Reconozco que a lo largo de las 24 horas del día, siento curiosidad ante las cosas que veo en mi entorno y me genera la necesidad de crear un producto o un servicio. Cuando mis hijos eran pequeños les decía: chicos, de lo que vais viendo por la carretera en los viajes, ¿qué cosas se pueden inventar? ¿Qué necesidades veis? A día de hoy, me sigue pasando lo mismo.

«Reconozco que, a lo largo de las 24 horas del día, siento curiosidad ante las cosas que veo en mi entorno y me genera la necesidad de crear un producto o un servicio».

Creo que, en lo más sencillo, es donde más necesidad podemos tener. Y las cosas sencillas son las que nos hacen trabajar permanentemente, porque están en nuestro día a día. Está muy bien que te prepares para algo muy específico y que seas el mejor en lo que haces; necesitas una persona así, y otra que tenga una creatividad bárbara para que pueda desarrollar. Cada uno somos un mundo. Y creo que tenemos un mundo en el que la mitad de las cosas están todavía por descubrir. Nos pensamos que ya está todo inventado y, al contrario, cuando pensamos eso es cuando más carencias solemos tener. Y está, normalmente, en las cosas simples.

«Creo que, en lo más sencillo, es donde más necesidad podemos tener. Y las cosas sencillas son las que nos hacen trabajar permanentemente, porque están en nuestro día a día».

¿Qué características tiene el mercado de la protección contra incendios? ¿Intervienen muchos actores? ¿Cuál es el posicionamiento de Firetecnia?

Dentro del sector de protección contra incendios estamos totalmente regulados; somos normativa pura y dura, aquí no puedes inventar demasiado. Por un lado, está muy bien pero, por el otro, durante muchos años también se ha permitido una competencia desleal, porque estaba regulado pero no controlado. Esto sucede en la mayor parte de las ocasiones cuando  publican  una ley, pero luego no se ocupan de su seguimiento. Esto, como en muchos oficios, genera un intrusismo inadecuado. En 2017 sacaron una nueva normativa que nos ayuda con el intrusismo; esto reduce el número de empresas que están operando, y solo nos quedamos las que hemos sabido sacarlo adelante.

«En 2017 sacaron una nueva normativa que nos ayuda con el intrusismo; esto reduce el número de empresas que están operando, y solo nos quedamos las que hemos sabido sacarlo adelante».

Por otro lado, tiene mucha controversia, porque sacan algo tan bestial y tan estricto que ni tan siquiera los propios organismos oficiales, el propio Estado, pueden cumplir con lo que ellos están solicitando en la norma. Aquí estamos teniendo un poco de controversia para ver cómo se aplica, dónde, en qué casos… Esto nos ha ayudado a quitar intrusismo, pero nos perjudica de cara al cliente porque, por mucho que trates de explicarle las cosas, como no está muy bien definido le genera inseguridad.

No obstante, está muy regulado. Tenemos un sector que es normativa e ingeniería pura y dura. Firetecnia, está entre los primeros puestos de empresas del sector. Ahora, el Ministerio de Industria está proponiendo que se lance algo específico dentro de formación profesional para nuestro sector.

En el panorama actual, la formación a los técnicos las damos las empresas. Y te puedes imaginar el coste económico y de tiempo que implica. Cuando los tienes muy formados, corres el riesgo, o bien de que creen su empresa, o bien de que se muevan con la competencia. Lo hemos hecho tan mal que, en vez de aprovechar y aunar un poco el esfuerzo  de los que quedamos en el mercado, seguimos compitiendo de manera desleal.

 Si creas una competencia saludable, primero, le estás garantizando al cliente final que, decida lo que decida, va a ser bueno para ellos, porque no hay esa lucha de poderes. Luego, cada uno debe investigar en I+D+i para buscar lo mejor que le diferencie del resto.

«Ahora, el Ministerio de Industria está proponiendo que se lance algo específico dentro de formación profesional para nuestro sector».

¿Por qué su apuesta por ASEME?

Porque todas las que estamos en la Asociación entendemos que juntas hacemos grandes cosas, que llegamos a más. Da igual cuál sea tu profesión o tu sector; sabes que puedes hacer algo más, y que tu experiencia, sirve para ayudar.

«Porque todas las que estamos en la Asociación entendemos que juntas hacemos grandes cosas, que llegamos a más».

Lo que es la unión y la creación de vínculos que ayuden a la empresa y al mercado en general, es totalmente necesario. Y creo que en España todavía nos queda por mejorar ese concepto.

De ASEME destacaría casi todo. Pertenezco a la Asociación desde hace mucho tiempo. La crisis ha generado que muchas mujeres hayan perdido su trabajo y hayan montado un pequeño negocio. Este negocio muchas veces ha sido creado sin datos de mercado y sin tener noción de su gestión. ASEME apoya mucho estas iniciativas porque, tanto si eres empresa grande como si eres pequeña, lo que buscas permanentemente es el beneficio  para ambas, que te formen, que tengan un tema interesante para desarrollar las habilidades que necesites para la gestión de tu negocio. Además, te ofrece la posibilidad de estar con gente que habla tu mismo idioma, y eso no tiene precio. Cada vez que nos reunimos, además de trabajo, hablamos de nuestras situaciones personales y siempre encontramos a alguien en quien apoyarnos.

La mujeres tenemos una forma de comunicarnos diferente a los hombres. No es ni mejor, ni peor, sino diferente. Aportamos tanto de tantas cosas en nuestro día a día, que nos permite sacar proyectos importantes adelante.

«La mujeres tenemos una forma de comunicarnos diferente a los hombres. No es ni mejor, ni peor, sino diferente. Aportamos tanto de tantas cosas en nuestro día a día, que nos permite sacar proyectos importantes adelante».

Hablemos de seguros: ¿cuál es su visión y experiencia con el mercado asegurador? ¿Cuál es su percepción? ¿Considera que es lo suficientemente conocido entre la sociedad y las empresas? ¿Y la figura del corredor?

Considero que es un sector completamente necesario y que en las empresas sí se conoce, pero no toda su magnitud. Hay un montón de coberturas que tienen los seguros y que los propios empresarios no conocen. Aquí sí que es obligatoria y totalmente necesaria la figura del corredor, porque es la persona que realmente te puede asesorar y ver qué necesidades tienes, no solamente tú como empresa, sino como empresario. La responsabilidad civil del empresario es espectacular; la de la empresa es grande, pero la del empresario, mucho más. Muchas veces, si no tienes un corredor de confianza que sepa explicarte estas cosas, no sabes lo que estás exponiendo en la empresa con tu patrimonio personal.

El empresario está exponiendo su patrimonio permanentemente. Como no tengas una persona, un buen asesor que sepa informarte de qué tipo de coberturas o garantías te ofrecen algunos seguros, corres un riesgo.

«Muchas veces, si no tienes un corredor de confianza que sepa explicarte estas cosas, no sabes lo que estás exponiendo en la empresa con tu patrimonio personal».

¿Cuál ha sido su experiencia con los corredores de seguros?

Hasta la fecha ha sido regular tirando a buena. No he tenido la excelencia, pero sí es cierto que me han ayudado muchísmo. Es más, antes de dar ningún parte al seguro, o antes de hacer ninguna gestión cuando lo he necesitado, me he puesto en manos del corredor. Él es quien me indica cómo vamos a plantearlo y a gestionarlo; es el que se ocupa de garantizar que lo que tienes contratado te va a funcionar.

«Antes de dar ningún parte al seguro, o antes de hacer ninguna gestión cuando lo he necesitado, me he puesto en manos del corredor».

Para mejorar esta falta de visibilización de la labor del seguro en la empresa, en el empresario y en la sociedad en general, ¿qué cree que necesita hacer el sector?

Formación e información. Es decir, que hagan charlas divulgativas, que cojan un sector, por ejemplo los administradores de las empresas, y explicar qué es lo que tienen que hacer los administradores societarios. A ellos tendrían que ofrecerles una jornada de formación y de información para que sepan exactamente qué es lo que tienen a sus espaldas. Su empresa tiene su seguro de RC, su seguro de vehículos, de locales, etc. Pero, ¿qué responsabilidad tiene el empresario de cara a su empresa? A lo mejor la tienes sin proteger y, al final, tú eres el responsable final.

Cuanta más información ofrezcan, más posibilidades tienen ellos de abrir más cuota de mercado, y nosotros de tener la tranquilidad y la seguridad de que, tomemos las decisiones que tomemos, esas decisiones están aseguradas. Porque las decisiones que tomas también se aseguran.

«A los administradores societarios tendrían que ofrecerles una jornada de formación y de información para que sepan exactamente qué es lo que tienen a sus espaldas».

Otro tema es que, aunque todos conocemos los seguros de automóviles, los de vivienda, los de industria, etc., no sabemos exactamente la cobertura o lo que te pueden garantizar. Aquí sí que es totalmente necesaria la figura del corredor, porque es quien realmente te va a asesorar en lo que necesitas, y qué es lo que te están garantizando con lo que estás contratando. Si no tienes un corredor de seguros, estás contratando como si compras en Amazon: no sabes realmente cuál es el producto que tienes. Como es algo tan intangible, porque los seguros son algo que no ves, como no tengas muy buena información de lo que estás contratando, a lo mejor resulta que no te sirve para la finalidad que tú estabas buscando. Y ahí la figura del corredor es totalmente necesaria, es tu asesor, quien te amplía con lupa la letra pequeña.

«Si no tienes un corredor de seguros, estás contratando como si compras en Amazon: no sabes realmente cuál es el producto que tienes».

¿Cuál es su percepción sobre la labor de la mujer en el mercado de seguros?

Mi percepción es que sí está visible, pero sí es cierto que seguimos teniendo un porcentaje muchísimo más elevado de hombres que de mujeres en puestos directivos. Sería muy bueno promover la integración de la mujer en este sector porque, probablemente, estén más implicadas en determinadas áreas aseguradas, a las que el hombre no puede llegar, simplemente porque desconoce, como es el caso de los seguros de salud. Tenemos esa empatía o forma de gestionar las cosas como trabajadoras, empresarias, madres, hijas, etc., que nos da una visión que, la traslademos donde las traslademos, en el seguro más todavía, nos aporta diferentes cosas que controlamos y que mostramos mejor. Sabemos hasta dónde tiene que llegar la cobertura porque, como mujeres, gestionamos más cosas y sabemos las necesidades que se pueden llegar a tener. Sabemos vender o presentar mejor una cobertura, porque conocemos la necesidad.

«Tenemos esa empatía o forma de gestionar las cosas como trabajadoras, empresarias, madres, hijas, etc., que nos da una visión que, la traslademos donde las traslademos, en el seguro más todavía, nos aporta diferentes cosas que controlamos y que mostramos mejor».

Deja una respuesta