Ramón Reyes, presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer; Mirenchu del Valle, presidenta de UNESPA

La Asociación Española Contra el Cáncer y UNESPA se unen para establecer un cauce de comunicación permanente e impulsar el desarrollo del Derecho al Olvido Oncológico

Redacción ‘MS’- El cáncer es el problema sociosanitario más importante de España. Se estima que 1 de cada 2 hombres y 1 de cada 3 mujeres tendrá cáncer a lo largo de su vida. Según estimaciones del Observatorio Contra el Cáncer en 2024 hubo 290.441 nuevos diagnósticos de cáncer. Una cifra que aumentará según las previsiones hasta los 317.000 nuevos casos de cáncer diagnosticados en el año 2030. Se calcula que en España hay más de 2,2 millones de supervivientes de cáncer. El diagnóstico de cáncer impacta en todos los ámbitos de vida de la persona. El nivel de supervivencia va en aumento debido, tanto a la investigación como a la prevención. El incremento de la tasa de incidencia del cáncer, por un lado, y de la supervivencia, por otro, plantea el reto de poner el foco sobre las necesidades no cubiertas tanto de los pacientes como de los supervivientes de cáncer.

El derecho al olvido oncológico fue introducido por el Real Decreto-ley 5/2023, de 28 de junio e implica, por lo que respecta a la contratación de seguros, que no puede denegarse el acceso a la contratación, ni imponerse condiciones más onerosas o discriminar de cualquier otro modo a una persona por haber sufrido una patología oncológica, una vez transcurridos cinco años desde la finalización del tratamiento radical sin recaída posterior.

Este derecho busca facilitar el acceso a seguros a las personas que han superado un cáncer, en el sentido establecido por dicha normativa.

En este sentido, la Asociación Española contra el Cáncer y la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (UNESPA) han firmado este 23 julio un protocolo de colaboración con el objetivo principal de establecer un cauce de comunicación permanente entre las dos asociaciones mediante un Grupo de Trabajo que se reunirá periódicamente e impulsar el desarrollo del derecho al olvido oncológico.

A través de este protocolo de colaboración, la Asociación Española contra el Cáncer y UNESPA trabajarán para identificar situaciones concretas en las que las personas que han superado un cáncer consideren que no se está cumpliendo con la normativa en materia de no discriminación establecida en la Ley de Contrato de Seguro, para que las entidades aseguradoras las conozcan y valoren individualmente las medidas correctoras que, en su caso, sean pertinentes. El protocolo también promueve el fomento de programas de formación para el personal de las entidades de UNESPA referentes a la contratación de seguros por parte de personas con cáncer o que hayan superado un cáncer, además de organizar jornadas formativas conjuntas.

Actualmente, la Asociación Española contra el Cáncer cuenta con un servicio jurídico para resolver dudas concretas a través del 900 100 036. Esta línea de comunicación con UNESPA supone un refuerzo y un nuevo servicio que se añade a la atención jurídica que viene prestando la AECC. Además, la Asociación Española contra el Cáncer cuenta con material e información de interés para pacientes y familiares a través de su blog y web corporativa.

«La regulación al derecho al olvido del paciente oncológico ha sido un gran paso para la protección social de los pacientes de cáncer y con este acuerdo seguimos trabajando para garantizar este derecho en las personas que sobreviven al cáncer«.

Ramón Reyes, presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer.

Este acuerdo permite poner de relevancia la importancia que tiene para el sector asegurador dar respuesta a las necesidades del conjunto de la sociedad y, particularmente, a las de las personas que han superado un cáncer”.

Mirenchu del Valle, presidenta de UNESPA.

El protocolo de colaboración se firmó este 23 de julio en la sede provincial de Madrid de la Asociación Española contra el Cáncer y proyecta un vínculo de colaboración entre ambas organizaciones para proteger los derechos de las personas que han superado un cáncer.