Cómo recuperar la piel del rostro de los efectos del sol

El sol es uno de los mayores responsables del envejecimiento de la piel, y en verano, sobre todo nuestro rostro, está especialmente expuesto. Aunque se hayan extremado los cuidados, antes del invierno conviene realizar tratamientos adecuados que faciliten la recuperación de esta capa protectora de nuestro organismo y la preparen para la llegada del frío.

Pero no hay que olvidar que la piel de cada persona es muy diferente y que los efectos del sol en ella también pueden serlo, de ahí que, ante cualquier síntoma anómalo, el consejo sea siempre ponerse en manos de profesionales. Hay grandes dermatólogos en Barcelona que harán un diagnóstico preciso para aconsejar el tratamiento más adecuado en cada caso.

Antes del invierno conviene realizar tratamientos adecuados que faciliten la recuperación de esta capa protectora de nuestro organismo y la preparen para la llegada del frío.

Los efectos del verano en el rostro

El sol deja huella en nuestra piel de formas diferentes. La del rostro es muy delicada, además de muy visible, y cualquier alteración, por pequeña que sea, va a afectar a nuestra apariencia. Por esta razón, y porque esas huellas pueden quedar de forma permanente si no se tratan a tiempo, es esencial cuidar la piel como se merece.

El síntoma más habitual de daños cutáneos es la deshidratación, que se manifiesta en forma de piel seca y apagada. Además de ello, pueden aparecer las denominadas arrugas de fotoenvejecimiento, así como manchas oscuras en las zonas más expuestas y acné solar. En casos muy extremos pueden aparecer quemaduras que dejen marcas o cicatrices y que son un factor de riesgo añadido para desarrollar cáncer de piel.

El síntoma más habitual de daños cutáneos es la deshidratación, que se manifiesta en forma de piel seca y apagada.

Tratamientos indispensables

Cada uno de los síntomas de los efectos del sol en la piel requiere de un tratamiento adecuado. La exfoliación y una hidratación extra son los primeros pasos, pero no son suficientes para que la piel recupere el aspecto que tenía antes del verano.

Además del uso de lociones o cremas ricas en vitaminas C y E (antioxidantes), en muchas ocasiones la piel va a requerir de tratamientos de choque mediante infiltración de sustancias reparadoras o el uso de avanzados equipos médicos o estéticos.

Estos últimos, hoy en día, ofrecen grandes resultados. Por ejemplo, muchas personas se someten a tratamientos de depilación láser Barcelona porque saben de su eficacia. Pero el láser IPL es también efectivo para tratar manchas o síntomas de envejecimiento prematuro.

Para regenerar la piel y ayudarla a recuperar la elasticidad y el brillo perdidos, tratamientos con colágeno y elastinas pueden ofrecer buenos resultados. Pero cuando la piel tiene un elevado grado de deshidratación o han aparecido manchas, es el ácido hialurónico la solución más efectiva.

Esta sustancia es capaz de retener hasta mil veces su peso en agua. Esto significa que no solo la piel consigue un grado de humectación adecuado, sino que tiene un efecto de relleno que ayuda a difuminar esas pequeñas arrugas provocadas por la acción de los radicales libres en la piel.

En cualquiera de los casos, es importante que sea un especialista quien realice un diagnóstico y aconseje el tratamiento adecuado según el estado de la piel y sus características. Iniciar un tratamiento por cuenta propia o ponerse en manos de personas no cualificadas no solo puede hacer que la piel no se recupere, sino que haya un efecto contrario al deseado.

No hay que olvidarlo, la piel de nuestro rostro es una de nuestras mejores cartas de presentación. La prevención es fundamental, pero el tratamiento adecuado cuando han aparecido signos de deterioro también lo es.

Dermatología Dexeus