Davinia García (experta en Felicidad): «La capacidad de comprender al otro y ponerse en su lugar nos da grandes oportunidades de ser nuestras protagonistas y las de los demás».

‘Muy Segura’ habla con Davinia García, directora de Proyectos y Formación en By Eva Vallina y experta en Felicidad.

¿Puede resumirnos los puntos que considera clave dentro de su trayectoria profesional y por qué?

A veces, las personas queremos tomar determinadas decisiones que creemos, que en ese instante, no podemos tomar. Y también, a veces hay instantes clave en los que la vida te dice: Ahora es momento, ¿qué vas a hacer con esto que te doy? En mi vida profesional puedo hablar de dos ocasiones claras en las que la vida me ha dado la oportunidad de decidir el camino a seguir.

El primero con TTI en el que descubrí que ayudar a los demás no sólo era lo que sabía hacer en lo personal. Vi que podía ser una gran vía para hacer crecer a la empresa y conectar a los trabajadores y a diferentes departamentos. Así, aposté por presentar un plan de organización y Kpis, que hizo posible un giro a nivel nacional en varios departamentos. La vida me dijo, ¿qué vas a hacer con tu mayor virtud? Y, yo escogí agudizar todos mis sentidos y aplicar “la ayuda a los demás” a impulsar la estrategia y organización de la empresa.

El otro gran momento, ocurrió en Perú, tras cumplir uno de mis sueños en el área social de juventud. Allí trabajamos por un plan social que permitiera a los jóvenes un acceso real a recursos y programas que les impulsara hacia la integración. Tras esto vino ese momento en el que pensamos: Y, ¿ahora qué? Mi respuesta fue que descubrí una verdad: eligiera lo que eligiera como próxima aventura profesional, la Felicidad, estaba en mi independientemente del lugar y las circunstancias.

«A veces hay instantes clave en los que la vida te dice: Ahora es momento, ¿qué vas a hacer con esto que te doy? En mi vida profesional puedo hablar de dos ocasiones claras en las que la vida me ha dado la oportunidad de decidir el camino a seguir».

¿Qué significa para usted la felicidad? ¿Por qué encuentra atractivo poner el foco en esta temática?

La felicidad para mi significa la conexión con tu interior (el quién eres), tus sueños y las que decisiones estás tomando. Por eso, el foco no es la temática de la Felicidad, sino la Felicidad es el foco desde el cual decidimos.

Cuando nacemos, necesitamos de una gran capacidad de aprendizaje, de imaginación, de inteligencia emocional, de pensamiento…para relacionarnos con nosotros, los demás y el mundo. Unas herramientas que vienen de serie y están a nuestra disposición haciendo posible que aprendamos lo que necesitamos. Estas herramientas nos proporcionan un plan perfecto para cumplir nuestras necesidades o sueños.  

Una verdad que comprendí en Mayo de 2012 cuando vino a mí el concepto: Desarrolla Felicidad. Que he definido como: “Ser la persona que quieres ser y tener la vida que quieres.”

«La felicidad para mi significa la conexión con tu interior (el quién eres), tus sueños y las  decisiones que estás tomando. Por eso, el foco no es la temática de la Felicidad, sino la Felicidad es el foco desde el cual decidimos».

Dar y recibir ‘felicidad’ no es nada fácil, en tanto en cuanto se trata de un concepto amplio y variable. No obstante: ¿percibe diferencias entre el hombre y la mujer en esta ‘tarea’?

Sin duda. Hombres y mujeres no somos iguales morfológicamente lo que incluye que tampoco lo somos a nivel cerebral (anatómica, química y neuronalmente). Por ejemplo, nuestros sistemas de entrada / procesamiento de información del exterior son diferentes. El tamaño de diversas zonas del cerebro presenta diferencias entre unos y otros, como, por ejemplo, la capacidad empática, con mayor volumen en la mujer.

Asimilando las diferencias que existen entre hombres y mujeres de forma natural y biológica,  alcanzamos una mayor comprensión de la realidad y del conocimiento humano.

Por este motivo las concepciones individuales de partida, de la Felicidad, son diferentes.  Ahora, bien, a lo largo de la vida y experiencias de cada uno, vamos moldeando la persona que deseamos ser y el tipo de sueños y vida que queremos vivir. Y aquí, sí podemos coincidir.

Para mí existe una gran diferencia entre lo que es Felicidad (ser la persona que deseas ser y tener la vida y sueños que deseas) y lo que es la forma en la que se manifiesta la felicidad en cada uno de nosotros (que sueños tenemos cada uno, con qué nos sentimos realizados, qué decisiones nos aportan bienestar, qué persona deseamos ser, con qué valores…)

Por ejemplo, todos nos reímos. Todos comprendemos el concepto de la risa, pero no nos hacen reír las mismas cosas, situaciones, ni personas. Tampoco cuando nos reímos lo hacemos unos y otros con la misma voz, sonoridad o intensidad. Hay una diferencia en la risa como concepto y en cómo la manifestamos cada uno de nosotros.

Es más, el concepto de Felicidad no es algo que se busque para encontrar o no. Es algo que se tiene y que se aumenta en la medida en la que vamos cumpliendo metas y sueños sobre la persona que queremos ser y los sueños y vida que queremos tener. Para mí, lo mejor de este concepto es que te centra en positivo y además, te permite ayudar a los demás, y, por supuesto, a los  seres queridos, a aumentar sus niveles de felicidad, también.

«El concepto de Felicidad no es algo que se busque para encontrar o no. Es algo que se tiene y que se aumenta en la medida en la que vamos cumpliendo metas y sueños sobre la persona que queremos ser y los sueños y vida que queremos tener».

Usted también incide en la necesidad de comprender qué significa la empatía. ¿Puede explicarnos de qué se trata y en qué medida afecta al sexo femenino, diferenciándolo (si así lo estima conveniente), del sexo masculino?

El concepto de empatía es la capacidad de ponerse en el lugar del otro, de su situación, vivencias y emociones. De comprender por qué toma las decisiones que toma, dice lo que dice.

En el cerebro de la mujer, la empatía ocupa un mayor lugar. Pero, la pobre empatía siempre sale mal parada, porque tenemos la sensación de que renunciamos a nosotras y ponemos delante a los demás.

La empatía se puede desarrollar con práctica y consciencia, por lo que hombres y mujeres pueden llegar a tener un mismo nivel de comprensión. Pero culturalmente, históricamente y biológicamente, ha sido más potenciada en la mujer.

En el mundo personal y profesional, la concepción de la empatía como cualidad que puede hacernos renunciar a nosotras, de velar siempre por la empresa o por los demás, es muy dañina. Pero su concepción positiva es muy poderosa.

La capacidad de comprender al otro y ponerse en su lugar nos da grandes oportunidades de ser nuestras protagonistas y las de los demás. Sirve para tomar decisiones más acertadas, para motivar correctamente a los equipos, para redirigir acciones erradas. Para proponer medidas que entiendan todos los intervinientes en la toma de decisiones, por muy diferentes que sean sus motivaciones y personalidades. Es fuente de unir, sumar y desarrollar. Es fuente de conexión, fortalece, y sin duda, nos hace brillar.

«La capacidad de comprender al otro y ponerse en su lugar nos da grandes oportunidades de ser nuestras protagonistas y las de los demás».

¿Qué frenos hemos de afrontar dentro de la sociedad actual para permitirnos ser felices?

Vivimos en un mundo lleno de distracciones donde nos paramos a mirar en lugares que no nos llevan donde deseamos. Un ejemplo sencillo es cualquier mañana yendo al tren. Personas que mirando a sus teléfonos andan, metiendo un codo, para adelantar a la persona que tienen delante. Un grito lleno de improperios a un coche que hace lo que no debe. Las redes sociales donde existe una exigente, y por otro lado, inalcanzable, necesidad de ser “el más popular” y “demostrar todo lo que uno es o hace” ya sea a nivel personal, social o profesional. Un largo etcétera de ejemplos cotidianos y no tan cotidianos que afectan a muchas de las áreas de nuestra vida.

Y es fantástico vivir en un mundo lleno de posibilidades y en constante desarrollo. Es prometedor. Y su contra parte, es que es muy distractor.

 Por este motivo, la mirada hacia el interior: ¿Quién estoy siendo? ¿Quién quiero ser? ¿Me gusta como soy? ¿Me gusta cuando grito al del coche delante de mis hijos? ¿Me encanta la imagen que me doy y que doy cuando un ser querido me habla y mientras, prefiero hacer caso al teléfono? ¿Estoy siendo realmente fiel a mis valores, a aquello que me define? ¿Soy fiel a mi vida? ¿Qué puedo mejorar? ¿Cómo puedo ir acercándome a mis sueños, en vez de alejarme? ¿Qué decisiones quiero tomar? Son preguntas a las que si les dedicamos un tiempo, las respondemos y cambiamos la forma de hacerlas, nos aportan más felicidad. Y nos liberan de las distracciones centrándonos en lo verdaderamente vital.

Creo sinceramente que nuestra naturaleza nos da las herramientas, pero no las utilizamos con la frecuencia necesaria para disfrutar de todos sus beneficios. Creo, que el mayor valor que tenemos es nosotros mismos, porque, literalmente, no podemos vivir sin nosotros.Y creo, que la vida, no es para vivirla distraídos, sino para disfrutarla de la mejor forma posible sin renunciar, a nosotros mismos.

«Creo sinceramente que nuestra naturaleza nos da las herramientas, pero no las utilizamos con la frecuencia necesaria para disfrutar de todos sus beneficios. Creo, que el mayor valor que tenemos es nosotros mismos, porque, literalmente, no podemos vivir sin nosotros».

Queriendo aportar mi granito de arena a un mundo mejor: https://www.linkedin.com/in/davinia-garcia/

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