Ignacio Infante, Gerente de Preventa y Soluciones Aseguradoras de Charles Taylor InsureTech

El seguro no necesita más tecnología, necesita tecnología que entienda el seguro

Por Ignacio Infante, Gerente de Preventa y Soluciones Aseguradoras de Charles Taylor InsureTech

El sector asegurador vive una transformación inevitable. El reto no es digitalizar por digitalizar, sino hacerlo con soluciones que realmente entiendan cómo funciona el negocio.

Llevamos años hablando de transformación digital. Eventos, informes, estrategias llenas de palabras como “agilidad”, “omnicanalidad” o “experiencia de cliente”. Pero la realidad del día a día en muchas aseguradoras es otra: sistemas heredados, procesos fragmentados y decisiones que se estiran más de la cuenta. Y mientras tanto, el mercado sigue moviéndose.

Con más de 20 años de trabajo en tecnología aplicada a seguros en distintas regiones del mundo, he aprendido que la tecnología no soluciona nada por sí sola. Hace falta criterio, conocimiento operativo y foco en lo importante. Modernizar no es cambiar un sistema: es cambiar la forma de pensar.

La tecnología es una herramienta. No un fin.

Hoy las aseguradoras necesitan lanzar productos en semanas, no en trimestres. Automatizar tareas repetitivas. Ofrecer autogestión real a sus clientes. Cumplir con regulaciones cambiantes sin ahogar a sus equipos. Y, sobre todo, tomar decisiones basadas en datos, no en intuiciones.

Pero para lograrlo no alcanza con “tener tecnología”. Hace falta contar con herramientas pensadas específicamente para el sector, que respeten sus tiempos, su complejidad y su lógica de negocio.

En Charles Taylor InsureTech trabajamos desde hace años con aseguradoras, brokers y MGAs en mercados tan distintos como Reino Unido, Latinoamérica o Asia. Sabemos que cada mercado es único, pero también que los desafíos operativos se repiten. Por eso desarrollamos soluciones como InHub, una plataforma flexible, modular y orientada a resultados.

Más allá del software, lo que nos diferencia es cómo trabajamos: acompañando, escuchando, proponiendo. Con equipos que conocen el sector y que entienden que cada aseguradora tiene sus propios tiempos, regulaciones y realidades.

«Con más de 20 años de trabajo en tecnología aplicada a seguros en distintas regiones del mundo, he aprendido que la tecnología no soluciona nada por sí sola. Hace falta criterio, conocimiento operativo y foco en lo importante. Modernizar no es cambiar un sistema: es cambiar la forma de pensar».

España: preparada para dar el salto, pero sin margen para seguir esperando

El mercado español tiene una gran oportunidad por delante. Cuenta con profesionales capacitados, estructuras consolidadas y ambición de modernización. Pero también arrastra sistemas poco flexibles, procesos que no escalan y una cierta inercia a posponer cambios estructurales.

Es el momento de actuar. No hace falta tirar todo y empezar de cero, pero sí trazar una hoja de ruta clara. Apostar por tecnología útil, por socios que hablen el idioma del seguro y por soluciones que permitan competir al ritmo que exige el presente.

Un modelo de trabajo único, también en España

Nuestro diferencial no es solo la tecnología, sino cómo la implementamos: ingenieros informáticos formados en seguros, convertidos en expertos de negocio tras años de experiencia global. Ese conocimiento operativo, probado en múltiples mercados, hoy impulsa nuestro plan estratégico en España, con presencia activa desde el área comercial, producto y una gerencia local de Recursos Humanos.
Apostamos por modernizar con criterio, con equipos cercanos y soluciones que entienden el seguro desde dentro.

«El mercado español tiene una gran oportunidad por delante. Cuenta con profesionales capacitados, estructuras consolidadas y ambición de modernización. Pero también arrastra sistemas poco flexibles, procesos que no escalan y una cierta inercia a posponer cambios estructurales».

El futuro no es lo que va a pasar

Decía Borges que “el futuro no es lo que va a pasar, sino lo que vamos a hacer”. Y esa frase aplica, palabra por palabra, al seguro. La diferencia no la hará quien tenga más sistemas, sino quien mejor los use. Quien se anime a revisar su forma de operar. Quien modernice con criterio, no por moda.

Porque lo que el sector necesita no son más promesas, ni más slides. Necesita soluciones que funcionen. Y que entiendan, de verdad, cómo es el seguro por dentro.