Falta de deseo sexual en mujeres: causas y tratamiento

Falta de deseo sexual en mujeres: causas y tratamiento

Por su interés para nuestra audiencia, ‘Muy Segura’ se hace eco del siguiente artículo, que también puede ser visitado en Canal Salud de IMQ a través del siguiente enlace: https://canalsalud.imq.es/blog/falta-deseo-sexual-mujeres-causas-tratamiento

Lo escribe el Dr. Luis María Guevara, Unidad Materno-infantil, Ginecología y Obstetricia en IMQ Zorrotzaurre.

La falta de deseo sexual en la mujer se debe a diversas causas. Aunque es natural que existan variaciones a lo largo de la vida, su ausencia puede significar que sufres un trastorno de interés sexual o de excitación. Este es un tema complejo que describimos en este artículo.

¿A qué se debe la falta de deseo sexual en las mujeres?

En la expresión de la sexualidad femenina intervienen una gran cantidad de factores emocionales, culturales y fisiológicos. Además, influyen las experiencias previas, el estilo de vida y el tipo de nexo con la pareja. En este sentido, cualquier dificultad en alguna de estas esferas incide negativamente en la libido.

Si tu deseo sexual ha disminuido, no necesariamente significa que ocurre algo fuera de lo común, ya que cada mujer es distinta. Si la definición de lo “normal” de por sí ya resulta difícil, lo es más aún en un campo tan complicado como las relaciones sexuales. En cualquier caso, las siguientes pautas te pueden ayudar:

  • La actividad sexual, incluyendo la masturbación, no despierta interés alguno.
  • Ausencia de fantasías o pensamientos relacionados con el sexo.
  • Preocupación y malestar por los dos síntomas anteriores.

Causas naturales

Existen varias circunstancias en las que la merma o ausencia del deseo se consideran naturales. Por ejemplo, en la menopausia, por la disminución de la secreción de hormonas ováricas. En esta nueva etapa en la vida de la mujer, es frecuente que la pérdida de interés se perciba como un cambio lógico y carente de relevancia.

Otra circunstancia que se considera normal es la persona asexual. En estos casos, no hay motivación de ninguna clase, aunque sí existe el deseo de compartir una relación romántica.

Causas psicológicas

Los cambios en el estado de ánimo o en la relación con la pareja, las preocupaciones y las enfermedades mentales también afectan el interés en el sexo. Estos son algunos de los factores:

  • Autoimagen negativa.
  • Ansiedad, depresión o estrés.
  • Baja autoestima.
  • Antecedentes de abuso o maltrato.
  • Rechazo a determinadas prácticas sexuales.

Causas físicas

Ciertos fármacos o hábitos, así como una amplia gama de trastornos, afectan a la libido:

  • Fatiga crónica: Causada por exceso de trabajo o en las etapas del embarazo y la lactancia.
  • Enfermedades: Dispareunia (relaciones dolorosas), artritis, diabetes, cáncer, cardiopatías y neuropatías.
  • Medicamentos: Antidepresivos que funcionan inhibiendo la recaptación de serotonina, analgésicos, antihistamínicos, ketoconazol y benzodiacepinas.
  • Hábitos: El abuso de sustancias, el alcohol o el tabaco pueden reducir el deseo sexual.

Problemas en la pareja

La conexión emocional es una de las motivaciones más fuertes para muchas mujeres. Cuando hay un deterioro, el deseo se desvanece. Si no existe confianza para expresar las preferencias sexuales o falla la comunicación a la hora de resolver los problemas, es difícil que se mantenga el deseo.

Posibles tratamientos

Antes de prescribir cualquier tipo de tratamiento, el médico necesitará realizar un historial clínico y un reconocimiento. Los análisis servirán para diagnosticar alguna enfermedad, y con la anamnesis se determinarán las causas emocionales o los conflictos con la pareja.

Terapia sexual

La psicología contribuye a la mejora de la sexualidad de varias formas. Una de ellas es proporcionar información actualizada para descartar mitos y falsas creencias que limitan la expresión de la sexualidad.

Además, ayuda a identificar el problema real y a controlarlo con terapias o ejercicios, que pueden realizarse individualmente o en pareja. Euskadi dispone de servicios públicos para la asesoría en sexualidad dirigidos a personas de todas las edades.

Medicamentos

Existen dos fármacos que estimulan el apetito sexual en la mujer. La flibanserina es un comprimido que se toma diariamente, mientras que la bremelanotida se administra vía subcutánea antes de tener relaciones sexuales.

Terapia hormonal

Los síntomas de la menopausia mejoran con la administración de estrógenos en forma de parches, píldoras o anillos de liberación lenta. Es una medida efectiva para tratar la atrofia vaginal que ocasiona las molestias en las relaciones sexuales. La prasterona, otra opción, es un tipo de testosterona de uso diario que se expende en forma de óvulos vaginales.

Cambios en el estilo de vida

Cuidar la salud general contribuye a mejorar la vida sexual. El ejercicio te ayudará a sentirte más cómoda con tu imagen, disipar el estrés y sus síntomas y a elevar el estado de ánimo. Por otro lado, restablecer una comunicación franca con la pareja es imprescindible para fortalecer los lazos emocionales, así como reservar un tiempo para la intimidad.

Todas estas alternativas enriquecen la relación, mejoran tu autoestima sexual y representan estímulos poderosos para la libido.

La falta de deseo sexual de la mujer responde a multitud de causas, y por esa razón es necesario identificarlas adecuadamente. La asistencia profesional es un recurso muy valioso para restablecer la libido, así como las recomendaciones que te hemos dado en este artículo.