Javier García-Bernal (APROMES): “Costa Rica es un país maravilloso donde puedes desayunar en el Caribe y cenar en el Pacífico”

Redacción ‘MS’- Javier García-Bernal, presidente de APROMES es, desde hace más de 25 años, Cónsul Honorario de Costa Rica en Madrid. “Para mí, Costa Rica es mi segunda casa”, confiesa. “El mundo diplomático no tiene nada que ver con el sector asegurador, pero es otra de mis facetas profesionales”. Recientemente, ha reflexionado acerca del funcionamiento del mercado asegurador en este país y ha querido destacar la magnífica labor que lleva a cabo Dña. Ana Helena Chacón Echeverría, Embajadora de Costa Rica en España.

El mercado asegurador costarricense

El mercado asegurador en Costa Rica, durante 84 años y hasta 2008, era monopolio estatal, de tal manera que solamente se distribuían seguros a través del INS, Instituto Nacional de Seguros. En 2006, tras el segundo nombramiento de Don Oscar Arias, Premio Nobel de la Paz, como presidente del país, una de las medidas que éste adoptó fue la de liberalizar algún sector, entre ellos, el del seguro”.

Según explica García-Bernal, hoy, no obstante, casi el 75% de las primas anuales son emitidas por el INS, lo que demuestra la clara fuerza y presencia que aún sigue teniendo el Instituto Nacional de Seguros. Sin embargo, el 24,5% del mercado total sobre primas, está representado por las aseguradoras extranjeras. “Cuando se liberaliza el sector, obviamente, empiezan a asentarse aseguradoras extranjeras y es cuando verdaderamente empieza a darse la creación de las figuras mediadoras privadas”, añade.

En Costa Rica rige la Ley Reguladora del Mercado de Seguros, Ley 8653, muy inspirada en la Ley 26/2006, de 17 de julio, de mediación de seguros y reaseguros privados en España. “Costa Rica estaba muy interesada en nuestra Ley de Mediación. Cuando se liberalizó el sector mediador, el país quiso conocer nuestra experiencia, a través de una ley vanguardista y moderna”, explica el presidente de APROMES.

Por su parte, el supervisor de seguros allí es la SUGESE, Superintendencia General de Seguros de Costa Rica. “Este supervisor, a su vez y esto es importante, depende del Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero, CONASSIF; de él también dependen los supervisores bancarios”, explica García-Bernal.

Desde la liberalización del mercado, el sector de la intermediación aseguradora costarricense está configurado de la siguiente manera (el país habla de intermediarios, no de distribuidores): agentes de seguros, sociedades de agencias de seguros, corredores de seguros y sociedades corredoras de seguros.

Para el ejercicio de la actividad de las sociedades corredoras, éstas tienen que estar, al igual que en España, en posesión de lo que llaman la licencia, y tener acreditación suficiente ante la superintendencia de que tienen capacidad para comercializar los seguros. Es un requisito similar al nuestro”, expone el presidente de APROMES.

Por su parte, en el caso del agente de seguros, igual que sucede en nuestro país, para que pueda éste desarrollar su actividad de intermediación, es la propia compañía aseguradora la que ha de poner en conocimiento del supervisor su acreditación en materia de formación, selección de las personas con las que trabaja y capacitación continua.

En Costa Rica rige la Ley Reguladora del Mercado de Seguros, Ley 8653, muy inspirada en la Ley 26/2006, de 17 de julio, de mediación de seguros y reaseguros privados en España.

El asociacionismo en Costa Rica

Javier García-Bernal también ha reflexionado sobre el asociacionismo en Costa Rica. “Hay dos organizaciones: la Asociación de Aseguradoras Privadas (AAP, el equivalente a UNESPA en España); y la Cámara de Intermediarios de Seguros (CIS), donde están los corredores y corredurías aglutinados”. En el país, aproximadamente, existen 20 sociedades corredoras, y estas tienen que estar dentro de la Cámara (su afiliación es obligatoria).

El presidente de APROMES también ha ofrecido unas breves pinceladas sobre el funcionamiento del sistema financiero y los bancos en el país latinoamericano. “Allí se habla de los bancos públicos. El banco público está autorizado para distribuir seguros. Ahora bien, solamente distribuyen a través, o bien de una sociedad de agencia (cuya estructura jurídica es de una sociedad anónima), o a través de una sociedad corredora de seguros (también como sociedad anónima). Tienen que optar, o por una, o por otra, pero es incompatible tener los dos intermediarios de distribución. El banco público es el que está facultado para distribuir de una u otra manera aquellos seguros a través de la banca”.

El presidente de APROMES también ha ofrecido unas breves pinceladas sobre el funcionamiento del sistema financiero y los bancos en el país latinoamericano.

El Espacio APROMES LATAM continúa en expansión

En este momento, APROMES, tiene una clara visión LATAM. De hecho, desde hace algo más de un año, la Asociación firmó un acuerdo de colaboración con ADOCOSE en la República Dominicana. “Hay unas relaciones muy estrechas de intercambio de experiencia y de forma de hacer”, añade García-Bernal.

Ahora, hace menos de un mes, en una Asamblea Plenaria de CONALPROSE de Panamá, se aprobó el establecer relaciones bilaterales entre APROMES y CONALPROSE. “Este acuerdo está ya firmado bilateralmente y están muy interesados en materia de formación”, expone el presidente de APROMES.

Fuera de ahí, APROMES ya ha mantenido conversaciones con Costa Rica, precisamente con uno de los representantes que pertenece al CIS. “Estamos preparando LATAM en Costa Rica. Al igual que estamos en conversaciones con Perú, con una asociación muy importante del país”.

Ahora, hace menos de un mes, en una Asamblea Plenaria de CONALPROSE de Panamá, se aprobó el establecer relaciones bilaterales entre APROMES y CONALPROSE.

Una trayectoria de más de 25 años como su Cónsul Honorario de Costa Rica en Madrid

“Para mí, es mi segundo país”, sostiene Javier García-Bernal. “Estos 25 años suponen haber encontrado muy buenas amistades, las cuales conservo y mantengo. Una Embajada es un verdadero escaparate del país al que representa”.

Estos 25 años de servicio de Javier García-Bernal han sido reconocidos por el Gobierno con la Gran Cruz de Plata de Juan Mora Fernández, que fue uno de los presidentes más relevantes del país, lo que le supone un gran honor.

Geografía e historia de Costa Rica

Costa Rica es un país que está en el istmo centroamericano, entre dos países: Panamá y Nicaragua. Posee una extensión de 51.060 Km2. “Es un país maravilloso donde el 27% del territorio nacional son parques y reservas naturales. Yo digo muchas veces que es el paraíso”, afirma Javier García-Bernal. Tiene siete provincias y su capital en el centro del país, es San José. “El país ofrece unas grandes alternativas de turismo, también de naturaleza, con posibilidad de que los intrépidos, si quieren, se puedan adentrar en la selva. Lo único que se recomienda es su vacunación previa. También tiene aproximadamente 20 volcanes; tiene el Bosque Lluvioso; y bajantes de ríos, donde se realizan los descensos de las canoas, las tirolinas y el resto de turismo medioambiental, un gran país de aventura”.

Es un país peculiar que tiene más de 200 especies de mariposas; de ahí que al INBIO (Instituto Nacional de Biodiversidad), en 1994, le otorgaran el Premio Príncipe de Asturias a la Biodiversidad. “Este Instituto posee unas colecciones magníficas de insectos, etc.; es una gozada”, explica García-Bernal.

Costa Rica también tiene islas muy destacadas. “Hay dos islas en el Pacífico maravillosas: la Isla del Coco y la Isla del Caño, donde están grabadas las películas de Parque Jurásico. Son reserva natural y no puede entrar cualquiera, si no es a través de una autorización especial para poder hacerlo. En Costa Rica se protege muchísimo el medio ambiente”.

En definitiva, Javier García-Bernal no deja de afirmar que: “Costa Rica es un país maravilloso donde si tú estás en el centro de San José, puedes desayunar en el Caribe y cenar en el Pacífico. Las dos mesetas son completamente diferentes”.

Costa Rica fue descubierta por Colón en su tercer y último viaje, en busca del Dorado. “No lo encontraron, porque allí no estaba; pero la exuberancia y la belleza del norte de Costa Rica supuso que en su tercer viaje el país fuera bautizado como tal (Costa “Rica”), por la belleza natural de sus bosques, su frondosidad, sus ríos. Hay una película muy buena de Carlos Saura, “El Dorado”, que la define muy bien; es una maravilla de película, grabada en ese país”.

Costa Rica políticamente se rige por su última Constitución de 1949. “Hubo una contienda; el bando vencedor aprobó esta Constitución, la cual no está variada, algo que es muy importante, máxime en un mundo convulso como éste. Es el único país que no tiene ejército, de hecho, cuando terminó la guerra, automáticamente, todos los cuarteles se convirtieron en museos, y desde entonces hasta cierta edad, la enseñanza en el país es obligatoria y gratuita”.

El turismo en Costa Rica

Turísticamente, Costa Rica te da muchas oportunidades para que te adaptes a lo que desees hacer. Puedes ir desde turismo “mochilero”, hasta de turismo de lujo en los grandes hoteles, sobre todo en una de las provincias más turísticas, me refiero a Guanacaste, donde hay playas paradisíacas”, recuerda el presidente de APROMES.

La capital, San José, tiene otros encantos. “Es una capital antigua y tiene, fundamentalmente, el Teatro Popular Melico Salazar, en recuerdo a un gran músico del país;  también está el Club Unión (equivalente aquí al Casino de Madrid), el Banco Central de Costa Rica, de la época colonial, y muchísimas cosas más”, reflexiona García-Bernal.

En materia de arte, estamos ante un país que posee una artesanía muy bella. “Uno de sus atractivos, aparte del turismo, es la artesanía de madera”, recuerda García-Bernal. “Es muy típico comprar carretas y figuras de frutas o animales. Uno de los grandes pintores de Costa Rica del siglo pasado fue Francisco Amighetti, conocido como Pancho Amighettii”.

Importante de resaltar son sus maravillosos productos como el café, el cacao, el banano y su plato tradicional que consiste en una combinación de arroz y frijoles, el gallopinto”.