La empatía, el eje sobre el que debe girar el equipo

Nuria Domínguez Cuenca, Coach de Coaching On Focus y Experta en Mindfulness por la UCJC

Comenzaremos por la definición que otorga la RAE al término empatía que lo define como: «Identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo de otro”. Por lo tanto, en nuestro lugar de trabajo es fundamental promover la práctica de la empatía porque no trabajamos solos, siempre somos parte de un equipo, de un grupo de personas donde la empatía juega un papel fundamental. Porque la actitud lo es todo, cómo hagamos frente a nuestras tareas para conseguir los objetivos comunes será lo que marque la diferencia del éxito y de cómo se sienta todo el equipo.

Es muy importante promover la empatía en los equipos de trabajo; ya que trae consigo grandes ventajas para el buen funcionamiento, como por ejemplo:

  • Mejora el clima laboral
  • Promueve el respeto entre todos los miembros del equipo
  • Alimenta el espíritu colaborativo
  • Estimula la asertividad, promoviendo el pensamiento crítico
  • Ayuda a crear cultura de equipo
  • Afianza las relaciones sociales existentes
  • Impulsa la comunicación intrapersonal
  • Entender los puntos de vista de los demás nos ayuda a eliminar prejuicios.
  • La empatía nos ayuda a sentirnos comprendidos, escuchados y respetadossea cual sea nuestra forma de pensar, lo que hará que estemos más abiertos a la hora de expresas ideas, opiniones y reflexiones. Nos ayuda a relacionarnos de una manera más sincera y a sentirnos más valorados por lo que somos.
  • Un equipo de trabajo formado por personas empáticas, entiende y proporciona al resto de empleados lo que se necesita, y esto crea un grado de confianza que fortalece las relaciones dando lugar a una mayor colaboración y mejora de la productividad.
  • Realizan una perfecta resolución de conflictos, al tener una actitud adecuada para llegar a acuerdos. Se practica la escucha activa y se entiende y se tiene en cuenta a todas las partes del equipo de trabajo. Esto ayuda a los implicados a tomar mejores decisiones y a tomarlas más rápido.
  • Crea el efecto espejocomentado anteriormente. Si las personas del equipo son empáticas, las «neuronas espejo» harán que el resto de empleados se contagien y los incitaremos a que también lo sean.

Como bien apuntaba la profesora e investigadora de la Universidad de Houston

Brené Brown en este video “la empatía es sentir CON las personas”. La empatía se basa en la conexión verdadera entre las personas, y muchas veces en las compañías se olvida que el trabajo lo hacen las personas y que los equipos lo forman personas conectadas por un bien común, por un propósito que deben perseguir en conjunto. Además, es fundamental que la empatía esté presente en todos los estadios de la cadena; es decir, que los líderes de las organizaciones también sean empáticos porque de esta manera los empleados se sentirán motivados, seguros y confiados.

“Uno para todos y todos para una”, el famoso lema de la obra de Alexandre Dumas “Los tres mosqueteros” viene a reflejar muy bien ese espíritu de compañerismo que todos queremos en nuestras empresas, donde prime el bien común pero para ello es primordial asentar una buena base con los valores y la cultura corporativa. Este espíritu no sale de la nada, es un trabajo que conlleva mucho tiempo y dedicación y que si miramos hacia el interior, la empatía es el eje sobre el que tiene que girar ese espíritu porque solo así se podrán alcanzar las metas que nos proponemos desde una mirada más humana y de una manera más consciente.

«Cuando todos los miembros de un equipo sienten que forman parte de él y que todos cuentan para la organización, todo lo que se propongan conseguir tendrá más fuerza y entusiasmo y, por tanto, serán más fácil conseguirlo y les aportará mayor felicidad».

Por último, aquí tienes unas claves para practicar y fomentar la empatía en los equipos de trabajo:Practica la escucha activa, escuchar para comprender y para conectar, no para responder a los demás. Como decía el filósofo Zenón de Citio: “tenemos dos orejas y una sola boca”, para oír más y hablar menos.

-Evita dar consejos innecesarios, simplemente limítate a acompañar.

-Existen tantos puntos de vista como personas, tu punto de vista no es único y tener en cuenta los demás puntos de vista puede enriquecer al equipo.

-Ten una mente abierta, evita los prejuicios.

-Identifica las emociones para poder regularlas de una manera adecuada y dirígete a los demás teniendo en cuenta ese espacio emocional.

-Entrena la gratitud, sé agradecido con todos los miembros del equipo.

-Promueve el optimismo entre el equipo.

-Fomenta la colaboración siempre que sea posible.

-No juzgues a los demás, “cada persona está librando su propia batalla”.

Y por último, conseguir que en un equipo la empatía sea primordial es una carrera de fondo, así que la perseverancia será clave para conseguir un equipo empático.