Redacción ‘MS’- La pandemia del Covid y lo vivido en el último año ha generado en miles de personas un cambio de prioridades, ya que algunos aspectos que antes eran cotidianos, como reunirse con familia o amigos, un simple beso o un abrazo, se han empezado a valorar más que nunca cuando han faltado.
La salud y la familia son los aspectos más relevantes para tener una vida feliz, según el III Estudio de Salud y Estilo de Vida de Aegon. Así lo declara el 59% de los encuestados, de los cuales el 34% piensa que gozar de salud y bienestar emocional es lo más importante para alcanzar una vida plena. No obstante, la situación vivida en este último año nos ha llevado a valorar otros aspectos como imprescindibles para ser felices.
En este sentido, tener una buena relación familiar (44%) es el segundo pilar para la felicidad de los españoles, el cual, además, ha aumentado casi un 14% respecto al año pasado. También, y en tiempos de crisis, tener una buena situación económica es esencial para los españoles, que lo sitúan en el tercer puesto con un 39% de los encuestados. De hecho, la relevancia de tener una buena economía familiar ha aumentado en un 31,31% en este último año.
Otros aspectos, como tener una buena vivienda (5%) o sentirse valorado por los demás (4%) no son considerados como esenciales para tener una vida feliz e incluso, han disminuido notablemente respecto al año anterior, específicamente un 50,5% y un 28,6% menos que el año anterior.
Entre las CCAA que más valoran la salud y la familia como aspectos más relevantes para ser felices encontramos Extremadura (72,5%), País Vasco (67,5%) e Islas Baleares (65,7%). En contraposición, aquellas regiones que menos lo valoran son Navarra (44,8%), Asturias y La Rioja (ambas con un 50%).
Si analizamos en base al género, se observa que las mujeres dan más importancia a la salud y al bienestar emocional como prioridad que los hombres (61% vs 57%), siguiendo la misma línea que el año anterior (74,1% vs 64,7%)
Sorprende que, en ambos casos, las relaciones familiares han cobrado más importancia en comparación con el año anterior: ahora ambos sexos sitúan las buenas relaciones familiares como el segundo eje de la felicidad (47% mujeres y 42% hombres), mientras que el año pasado ocupaba el tercer puesto (40,7% mujeres y 36,3% hombres), justo por debajo de la buena relación en pareja, que este año queda en cuarta posición (27% vs 36,8% mujeres y 39% vs. 45,6% hombres en 2020 y 2019 respectivamente)
A parte de tener una buena relación de pareja (39% sobre el 33% del promedio), los hombres dan una importancia por encima de la media a tener tiempo libre (+3%) y éxito profesional (+2%). Por su parte, las mujeres centran su felicidad por encima de la media en las relaciones familiares (+3%) y en sentir que aportan algo para mejorar su entorno o la sociedad.
No obstante, las diferencias más relevantes vienen dadas por edades. Si bien los aspectos más importantes para ser felices, como la salud, las relaciones familiares y la situación económica, siguen siendo los mismos, se observan mayores variaciones en la generación Z. Estos últimos dan una importancia por encima del promedio a las actividades de ocio (+9% sobre el promedio), a tener amigos (9%) a sentirse útil para los demás (+6%) y sentir que aportan al entorno (+10%), así como a alcanzar éxito profesional (+8 puntos).
En relación al resto de generaciones, tanto los millennials como la generación X dan más relevancia a la conciliación personal y laboral (+6% y 9% sobre el promedio), mientras que los baby boomers se preocupan más por su relación de pareja (+8%) y el hecho de vivir en un estado sin emergencias sanitarias (+3%).
La felicidad es esencial en el desarrollo y bienestar de todos los seres humanos. El camino hacia la misma requiere de valores fundamentales como la amabilidad y la compasión, especialmente en tiempos de crisis como la pandemia del Coronavirus. Por ello, desde Aegon dedican un apartado en su blog en el que ofrece más información y recomendaciones para cuidar de la salud y el bienestar emocional. Mente y cuerpo están interconectados y el bienestar emocional es necesario en cualquier etapa de la vida.
