María Luisa Segoviano Astaburuaga, galardonada en la XXVIII Edición del Premio Pelayo para Juristas de Reconocido Prestigio

‘Muy Segura’ entrevista a María Luisa Segoviano Astaburuaga, galardonada con la XXVIII Edición del Premio Pelayo para Juristas de Reconocido Prestigio.

María Luisa Segoviano Astaburuaga es Presidenta de la Sala Cuarta del Tribunal Supremo.

¿Qué significado posee para usted su reciente reconocimiento con el galardón de la XXVIII edición del Premio Pelayo para Juristas de Reconocido Prestigio?

Me ha hecho una enorme ilusión, ha sido un aliciente más para seguir manteniendo el entusiasmo imprescindible para un adecuado desempeño del cargo. Cuando me telefonearon para comunicarme la noticia me quedé conmocionada, apenas acerté a dar las gracias y tuve que hacer un verdadero esfuerzo de concentración para poder seguir la conversación, me parecía un sueño.

El conocer la identidad de las personas que con anterioridad han recibido este galardón, me provoca un auténtico vértigo, ya que se trata de juristas de un inmenso prestigio a los que siempre he profesado una gran admiración y que para mí representan un modelo a seguir, un referente.

«Cuando me telefonearon para comunicarme la noticia me quedé conmocionada, apenas acerté a dar las gracias y tuve que hacer un verdadero esfuerzo de concentración para poder seguir la conversación, me parecía un sueño».

¿Puede concretarnos algunos de los principales hitos que ha atravesado durante su “larga y fructífera” trayectoria en el ámbito jurídico? ¿Por qué tienen tal significado para usted?

Mi trayectoria profesional ha estado íntimamente ligada al ámbito de la jurisdicción Social. Salvo unos años en los que ejercí como Magistrada de Primera Instancia en Bilbao, mi dedicación ha sido siempre al orden Social de la Jurisdicción.

Recuerdo con mucha nostalgia los años pasados en aquel Juzgado de Primera Instancia de Bilbao donde tuve ocasión de resolver cuestiones variopintas que me descubrieron que el derecho sirve para solventar problemas que afectan a la vida y sentimientos íntimos de las personas (divorcios, reconocimiento de la paternidad, desheredar a algún hijo…).

Posteriormente ejercí como Magistrada del Juzgado de lo Social número 1 de Valladolid  y disfruté del trato personal con los profesionales -abogados, procuradores, graduados sociales- que me dieron la oportunidad de conocer de forma directa los  problemas reales del mundo laboral, el difícil equilibrio entre los derechos e intereses de trabajadores y empresarios, sin olvidar los asuntos de Seguridad Social, que afectan a personas habitualmente en situación de vulnerabilidad, enfermedades, incapacidades, viudedad, desempleo…

En el año 1997 fui elegida Presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, sede de Burgos, donde además de ejercer como Magistrada, realice labores de gestión y organización de la Sala, lo que me facilitó la adquisición de una valiosa experiencia en ese campo, que me ha sido de gran utilidad para el desempeño de mi actual cargo.

En el año 2002 fui designada Presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, sede de Valladolid, donde continué con mi actividad jurisdiccional completada con funciones de organización y gestión de la Sala, lo que me permitió adquirir una mayor experiencia en dichas actividades, con el subsiguiente conocimiento para el posterior desempeño del cargo de Presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo.

En el año 2006 fui designada Magistrada del Tribunal Supremo, Sala Cuarta, donde el ejercicio de la función jurisdiccional ha sido doblemente satisfactorio, no solo por las importantes cuestiones que decide la Sala sino por la trascendencia que tienen sus decisiones, crean jurisprudencia y en no pocas ocasiones han generado importantes reformas legislativas. Me estoy refiriendo al  avance en   la consecución de la igualdad real y efectiva de las mujeres (normativa sobre la igualdad de trato y  no discriminación entre mujeres y hombres en materia retributiva, planes de igualdad,  despido objetivo de trabajadora embarazada,,,), el reconocimiento de la naturaleza laboral de la relación entre riders y plataformas…

En el año 2020 pasé a presidir la Sala de lo Social del Tribunal Supremo, donde he tenido que afrontar grandes retos. La tradicional litigiosidad en el ámbito laboral se ha visto agravada por la crisis originada por el COVID que ha supuesto una importante alteración de las relaciones laborales, moduladas por   la copiosa legislación aparecida durante la pandemia y que, ante el significativo incremento de recursos ha llevado a la Sala a adoptar nuevas  medidas para hacerle frente: nuevas normas de reparto, preferencia en la tramitación de los  coloquialmente denominados “asuntos COVID”…

«En el año 1997 fui elegida Presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, sede de Burgos, donde además de ejercer como Magistrada, realice labores de gestión y organización de la Sala, lo que me facilitó la adquisición de una valiosa experiencia en ese campo, que me ha sido de gran utilidad para el desempeño de mi actual cargo».

Paralelamente he ejercido como docente en la facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid, en la disciplina de Derecho Procesal, durante cerca de veinte años.

Fui elegida miembro de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de Valladolid en el año 2001 y desde el año 2016 soy Presidenta de dicha institución.

Soy vicepresidenta de la Junta Electoral Central desde julio de 2020.

Autora de numerosas publicaciones, en especial en materia procesal, de igualdad de género y concursal.

Autora de numerosos artículos sobre derechos fundamentales, utilización de las nuevas tecnologías, despido, seguridad social y cuestiones procesales.

Directora de numerosos Cursos de Formación, designada por el CGPJ. Ponente en múltiples Cursos, Jornadas y Seminarios organizadas por diversos organismos e instituciones.

«Autora de numerosas publicaciones, en especial en materia procesal, de igualdad de género y concursal».

Uno de los aspectos más valorados de cara a hacerle entrega del mencionado galardón es su compromiso con el mundo del derecho del trabajo y de la seguridad social. ¿Qué evolución aprecia que han experimentado estos ámbitos durante la última década? ¿A qué desafíos más importantes se enfrenta el derecho del trabajo en un momento como el actual en nuestro país?

El mundo del  Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social es un organismo vivo, que está en continua evolución y que es especialmente sensible a los cambios sociales que se van produciendo.

La última década ha supuesto dar verdaderos pasos de gigante en la situación del mundo laboral.

Uno de los fenómenos que con más fuerza ha irrumpido en las relaciones laborales ha sido el de las tecnologías de la información y la comunicación. La generalización del uso de dispositivos digitales en la prestación laboral ha generado un elenco de problemas nuevos a los que nos hemos ido enfrentando. En un principio con herramientas viejas hemos tenido que resolver problemas nuevos, especialmente relacionados con el control por parte del empresario de los dispositivos digitales puestos a disposición del trabajador para la realización de la prestación laboral -control del correo electrónico, Internet, móvil.-, así como la generalización de nuevas formas de la prestación laboral como el teletrabajo. Actualmente, en el año 2018, la LO de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales ha venido a regular muchas de estas cuestiones aunque todavía quedan bastantes por resolver.

«Uno de los fenómenos que con más fuerza ha irrumpido en las relaciones laborales ha sido el de las tecnologías de la información y la comunicación. La generalización del uso de dispositivos digitales en la prestación laboral ha generado un elenco de problemas nuevos a los que nos hemos ido enfrentando».

El último hito en la evolución de las relaciones laborales ha sido, no un paso, sino un  verdadero salto, me estoy refiriendo a la utilización de algoritmos, inteligencia artificial y creación de perfiles para la selección del personal, mantenimiento del empleo, condiciones de trabajo y promoción en el trabajo. La dificultad estriba en alcanzar a conocer si en la elaboración del “perfil” las reglas, instrucciones o parámetros que se han utilizado pueden contener algún sesgo discriminatorio, edad, sexo, raza, pertenencia o no a un sindicato..

«El último hito en la evolución de las relaciones laborales ha sido, no un paso, sino un  verdadero salto, me estoy refiriendo a la utilización de algoritmos, inteligencia artificial y creación de perfiles para la selección del personal, mantenimiento del empleo, condiciones de trabajo y promoción en el trabajo».

¿Qué destacaría de su faceta como docente? ¿Qué valores o cualidades considera le acompañan para ejercer en este ámbito y qué aspectos en el día a día son los que más satisfacciones le otorgan? ¿Por qué?

Creo que es esencial que te guste verdaderamente la docencia para que la puedas ejercer adecuadamente. La trasmisión del saber para mi ha sido siempre muy importante. El poder compartir y transferir a otros tus conocimientos supone un enriquecimiento no solo para el que aprende sino también para el docente que, no lo olvidemos, a su vez se nutre de los conocimientos y experiencias de sus alumnos.

«La trasmisión del saber para mi ha sido siempre muy importante».

Pelayo ha premiado en esta edición a una mujer, hecho que reconoce con creces la importante labor desempeñada en el mundo de la judicatura. ¿Qué visión posee acerca del desempeño, posicionamiento y nivel de notoriedad de la mujer en el sector jurídico?

La presencia de la mujer en el ámbito jurídico es cada día más notable y no solo en términos cuantitativos, sino también cualitativos. Una mirada a nuestro alrededor nos muestra el exponencial incremento de alumnas en las Facultades de Derecho, las brillantes calificaciones que obtienen, las difíciles oposiciones que superan con muy buena puntuación y su presencia en despachos profesionales.

No obstante, aún no se ha conseguido la ansiada igualdad, que no sea noticia que a una mujer la nombran para un determinado puesto en la cúpula judicial  o para ocupar  un cargo de dirección en un despacho de abogados.

«La presencia de la mujer en el ámbito jurídico es cada día más notable y no solo en términos cuantitativos, sino también cualitativos».

¿Desea realizar algún comentario o reflexión adicionales?

Me parece muy acertado que desde Pelayo se potencie y se premie el esfuerzo y la dedicación al ámbito jurídico, que se de visibilidad a la influencia que en la vida de la ciudadanía puede tener la actividad de los operadores jurídicos en sus distintos ámbitos de actuación.

«Me parece muy acertado que desde Pelayo se potencie y se premie el esfuerzo y la dedicación al ámbito jurídico».