Conclusiones del Informe de Riesgos Globales 2022

Redacción ‘MS’- Los riesgos sociales y medioambientales constituyen las grandes amenazas del mundo para los próximos cinco años, según las conclusiones del Informe de Riesgos Globales 2022 (GRR), documento elaborado por el Foro Económico Mundial que este año lanza su 17ª edición, de nuevo con la colaboración de Marsh McLennan.

Basado en los resultados de dos encuestas (Global Risk Perception Survey y Executive Opinion Survey), en las que han participado más de 100 líderes españoles, identifica el desempleo como la principal amenaza en España frente a la crisis económica o la ralentización de las medidas para paliar la crisis climática, que son las mayores preocupaciones globales. En nuestro país, el volumen de parados, unido a la prolongación del estancamiento económico y agravado por la pandemia, han venido a acrecentar, más si cabe, los problemas de subsistencia de las familias españolas.

A corto plazo, algunas de las otras principales inquietudes mundiales que se identifican son las crisis de subsistencia y el deterioro de la salud mental.

El emblemático documento, señala que, en un horizonte a diez años, la preocupación principal pasa a centrarse en los riesgos medioambientales ya que se consideran las cinco amenazas a largo plazo más críticas para el mundo, así como los que tienen mayor potencial de perjudicar a las personas y al planeta. Entre estos riesgos destacan el «fracaso de la acción contra el cambio climático», los «fenómenos meteorológicos extremos» y la «pérdida de biodiversidad”. Los encuestados también señalaron las «crisis de la deuda» y las «confrontaciones geopolíticas» entre los riesgos más graves para los próximos diez años. España también se ve afectada por todos estos riesgos, salvo el último que no parece tener relevancia para los líderes nacionales.

“Una vez más este documento corrobora lo que estamos viviendo y que es una realidad, los objetivos para el cuidado del medioambiente son prioritarios a nivel mundial. En esta línea la colaboración público- privada en la recuperación verde es fundamental y no hay más que revisar las medidas que se presentaron recientemente en la COP 26, en la que las naciones se comprometieron a limitar el incremento de las temperaturas globales a solo 1,5 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales. Para conseguirlo, las empresas deben prepararse y adaptarse con un más ajustado cumplimiento normativo, políticas ESG y desarrollo de planes alternativos para transformar el mundo”.

José María Carulla, Managing director de Marsh Advisory en España y portavoz del Informe.

Los riesgos tecnológicos, como la «desigualdad digital» y el “fracaso en ciberseguridad», también están considerados amenazas críticas a corto y medio plazo para el mundo, según los resultados de la encuesta. No obstante, estos riesgos bajan en la clasificación, sin embargo, no los podemos perder de vista a largo plazo por los costes que conllevan para cualquier organización.

Para valorar el balance de los últimos dos años, los participantes del GRPS identificaron los riesgos sociales como prioritarios ya que la pandemia ha puesto en primera línea cuestiones que ahora son más relevantes que nunca como la «erosión de la cohesión social», la «crisis de subsistencia» y el «deterioro de la salud mental». Solo el 16 % de los encuestados se muestra positivo y optimista con respecto a las perspectivas globales y tan solo el 11 % piensa que la recuperación mundial se acelerará. En cambio, la mayoría de los encuestados considera que los próximos tres años se caracterizarán por la inseguridad en todos los sentidos.

Recuperación económica desigual

Los efectos de la pandemia siguen suponiendo un reto para la recuperación de la economía mundial, y su evolución ocasionará incrementos en las desigualdades. Se espera que para el año 2024, las economías en desarrollo (sin incluir China) crecerán un 5,5 % menos de lo previsto antes de la pandemia, mientras que las avanzadas habrán superado las estimaciones en un 0,9 %.

El nuevo repunte del Covid-19 de finales de 2021 complica la recuperación, lo que está agravando los desequilibrios en el mercado laboral, el proteccionismo y las más recientes brechas digital, educativa y de competencias. En el caso de España, a pesar de los fondos Next Generation, esto es una realidad que se repite.

En algunos países, la rápida vacunación, el éxito de la transformación digital y las nuevas oportunidades de crecimiento conducirán a la vuelta a las tendencias anteriores a la pandemia a corto plazo, mientras que otros muchos que se verán lastrados por las bajas tasas de vacunación (en los 52 países más pobres, donde vive el 20% de la población mundial, solo el 6 % de la población había sido vacunada en el momento de redactar este documento), la presión en los sistemas de salud, la fractura digital y el estancamiento de los mercados laborales.

Transición climática

Según el Informe, el «fracaso de la acción contra el cambio climático» es sin duda la amenaza que se reconoce más relevante a largo plazo para el mundo y el riesgo con el mayor alcance porque podría tener los efectos más graves durante la próxima década. Los efectos del cambio climático se están materializando con rapidez en forma de sequías, incendios, inundaciones, escasez de recursos y extinción de especies, entre otros. Fenómenos todos ellos que afectan a nuestro país con regularidad ya que, en 2020, Madrid fue una de las ciudades del mundo que experimentó temperaturas extremas como no se habían visto en años, se llegaron a los históricos 42,7 °C. En Dallas, las temperaturas más bajas en 72 años fueron noticia, se registraron los −19 °C.

La ciberseguridad

La creciente dependencia de los sistemas digitales se ha visto intensificada por la pandemia y ha cambiado las sociedades. En los últimos 18 meses, los sectores han sido objeto de una rápida digitalización, los trabajadores han adoptado el teletrabajo, las plataformas y los dispositivos que facilitan este cambio se han multiplicado, al mismo tiempo que las amenazas de ciberseguridad.

Estas siguen creciendo (en 2020, los ataques de malware y ransomware aumentaron en un 358 % y un 435 % respectivamente) y están superando la capacidad de las sociedades para prevenirlas o responder a ellas de forma eficaz. En los últimos años, tanto los organismos públicos como empresas privadas de todo el mundo han sido el objetivo de los piratas informáticos.

La resiliencia

Para una gestión más precisa de las crisis actuales, los diversos actores públicos y privados deben interaccionar activamente y buscar el equilibrio de los costes, la regulación hacia la resiliencia y la modificación de los acuerdos de intercambio de información para aprovechar las oportunidades que se abrirán en áreas como las cadenas de suministro o los códigos de conducta sectoriales. Todo lo anterior evidencia la necesidad global de incorporar una visión basada en la resiliencia a todos los niveles.

“En el caso de España, la pandemia ha supuesto un reseteo del mundo, y en el caso de las empresas, tras poner en marcha sus planes de recuperación, ha provocado que vean necesario contar con una mejor preparación a nivel nacional que les permita planificar e invertir en la gestión de sus riesgos para poder ejecutar sus estrategias con eficiencia”.

José María Carulla, Managing director de Marsh Advisory en España y portavoz del Informe.

Un año más, el informe invita a reflexionar sobre las amenazas a las que nos enfrentamos en los próximos años sugiriendo distintos objetivos de resiliencia de los gobiernos, las empresas y las comunidades para garantizar una coordinación global y abordar juntos los riesgos críticos con el fin de una recuperación que minimice las desigualdades.

El Informe de Riesgos Globales 2022 ha sido elaborado con el apoyo de la Junta Asesora de Riesgos Globales del Foro Económico Mundial en colaboración con sus socios estratégicos Marsh McLennan, SK Group y Zurich Insurance Group y sus asesores académicos en la Oxford Martin School (Universidad de Oxford), la Universidad Nacional de Singapur y el Wharton Risk Management and Decision Processes Center (Universidad de Pensilvania).

Puede accederse a la descarga del Informe a través del siguiente enlace.