2023: Un año clave para abordar la salud mental en las empresas

Por Eva García, socia fundadora en Coaching on Focus, consultora de RR.HH., Bioquímica y Neurocoach.

El mismo día que los niños de San Ildefonso cantaban números que traían la felicidad a miles de personas, el diario El País, publicaba un artículo en el que se daba la voz de alarma por el aumento de las bajas por problemas de salud mental.

Nada más y nada menos que un 17% de aumento de bajas en toda la población respecto al año anterior.

Ya en Agosto del pasado año, Fremap publicó un estudio en que se alertaba de un aumento en las bajas laborales en menores de 35 años en el periodo del 2015 al 2021, con un incremento del 45% en la duración de las bajas. Como vemos la situación es muy preocupante y lo peor es que no tiene visos de mejora.

También a nivel internacional instituciones como la Health Data Org, han identificado en su informe, el Covid persistente, la salud mental y el cambio climático, como los 3 principales problemas de salud global para 2023.

Dejemos que los datos hablen por sí mismos:

  • Una de cada cuatro personas tendrán un trastorno mental a lo largo de su vida
  • Los trastornos mentales representan casi el 15% de los problemas de salud, superando el cáncer y los problemas cardiovasculares
  • El número de suicidios en el mundo es de 1 Millón de personas al año
  • 450 Millones de personas en el mundo se ven afectadas por un problema de salud mental que dificulta gravemente su vida
  • Entre el 12% y el 27 % de los problemas de salud mental se pueden atribuir a las condiciones de trabajo

Fuentes:

  • Encuesta nacional de salud 2017
  • Costes socioeconómicos de los riesgos psicosociales. Secretaría de salud laboral y medio ambiente UGT CEC.
  • Estudio de la evolución de los trastornos mentales y del comportamiento en la incapacidad temporal. FREMAP 2022

La mayoría de las campañas para apoyar y prevenir la salud mental provienen de asociaciones, ong’s, medios de comunicación, instituciones públicas o iniciativas ciudadanas. Sin embargo, todos podemos aportar a mejorar la salud mental colectiva.

No es la primera vez ni será la última, que desde Coaching On focus decimos que las empresas del futuro son aquellas que ponen al personal en el centro. Cada una de las personas que conforman la empresa son su principal activo, por tanto, las empresas tienen la responsabilidad de cuidar, no solamente de la salud física, sino de la salud mental de sus plantillas.

De nada sirve que se realicen reconocimientos médicos, incluso que haya en los propios centros de trabajo departamento médicos especializados, si continúan recetando Lexatin o Lorazepam de manera indiscriminada, (os recuerdo que somos un país puntero en el consumo de ansiolíticos y antidepresivos) y sin poner solución a las causas; muchas veces directamente relacionadas con el entorno laboral.

Recordemos que según la OMS la salud consiste en un estado completo de bienestar físico, mental y social y no solo la ausencia de afecciones o trastornos.

Contamos con la ventaja de tener muchos datos al respecto, para poder tomar decisiones basadas en evidencias que son muy claras, pero al fin a y al cabo, y por mucho que nos lo digan desde diferentes fuentes, hasta que no son los datos económicos los que hablan, hasta que no vemos monetizados los problemas, no se toman decisiones al respecto. Casi 400 millones de euros es la estimación que hacen las mutuas del coste que tienen las bajas laborales por causas de problemas mentales.

Principales problemas de salud mental derivados del trabajo

Obviamente no todos los motivos de las bajas podemos encontrarlos en problemas en el ámbito laboral, los problemas personales o familiares, como enfermedades del propio empleado o de personas allegadas, muchas veces están detrás de estas bajas.

Sin embargo, no olvidemos que pasamos casi más tiempo en el trabajo que en nuestras propias casas, por lo que es importante poner el foco en los problemas reales que pueden desencadenar las bajas laborales del personal.

Dentro del ámbito profesional, la mayoría de las causas por las que los médicos conceden las bajas son la ansiedad, la depresión y el estrés laboralLos trastornos más frecuentes en el ámbito laboral son:

  • Ansiedad
  • Depresión
  • Alteraciones del sueño
  • Fatiga
  • Ideas suicidas
  • Trastornos adaptativos, o dificultad para flexibilizar ante ciertas situaciones

Sin embargo ¿cuáles son las verdaderas razones que nos llevan a estos estados?, ¿cómo llegamos a cada uno de estos trastornos?

La presión en el trabajo, la falta de motivación, estilos de liderazgo autoritarios, cargas excesivas de trabajo, incertidumbre laboral o malas relaciones con los compañeros o superiores suelen estar en el origen de muchas de estas enfermedades.

Las malas condiciones laborales y la ausencia de comunicación o proyección en las empresas, originan lo que los psicólogos llaman la Indefensión aprendida; esa sensación de que hagas lo que hagas no puedes cambiar nada, y que lleva a miles de personas a la desmotivación y la depresión cada año en las compañías.

¿Qué pueden (y deberían) hacer las empresas al respecto?

Primero de todo debemos dejar claro que cualquier acción pasa por visibilizar el problema, con total transparencia, así como contar con el apoyo de todos los niveles, ya sean grandes compañías o PYMES, especialmente de la Dirección.

A raíz del Covid, algunas empresas ya han ido incorporando servicios especializados de apoyo a su personal y acciones concretas para mejorar el bienestar y la salud física y mental de las plantillas. Algunas de estas acciones son:

  • Servicios de apoyo psicosocial y psicoeducación
  • Formación en regulación y Gestión Emocional
  • Espacios que promuevan la relajación y la práctica del Mindfulness
  • Capacitación en habilidades interpersonales y soft skills
  • Mejora del clima laboral

En definitiva, dotar de recursos a nuestros profesionales y mantener una red de apoyo sana, son fundamentales para prevenir y evitar las tremendas consecuencias que tienen las enfermedades mentales en nuestras vidas y en nuestros puestos de trabajo.

Luchemos contra la estigmatización de las enfermedades mentales. Busquemos soluciones en los entornos laborales para prevenir y mejorar el bienestar de las personas.

Normalicemos los problemas de salud mental, porque cualquiera estamos en riesgo de caer en el pozo de la depresión, en la angustia de la ansiedad o en las fauces del bloqueo, la soledad y la incomprensión de los demás.