Día Mundial del Medio Ambiente: proteger el planeta es sinónimo de preservar la salud

Redacción ‘MS’- El medio ambiente y la salud están relacionados de manera estrecha. El Día Mundial del Medio Ambiente nos recuerda la importancia de conservar y cuidar nuestra naturaleza, la riqueza de su biodiversidad y de sus ecosistemas. Así lo expresa Aegon a través de un reciente comunicado.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 24% de las enfermedades mundiales están relacionadas con el medio ambiente, lo que representa que aproximadamente el 20% de las muertes en el continente europeo y más de 13 millones de fallecimientos a nivel mundial. Esto se deber a problemas derivados de la degradación del medio ambiente. Son factores como la contaminación atmosférica y acústica, los efectos del cambio climático, como las olas de calor, y la exposición a productos químicos los causantes de graves alteraciones en la salud.

“Mantener un estilo de vida saludable durante toda la vida lleva a gozar de una vejez más plena. En ello también influye disfrutar de un entorno saludable y un medio ambiente de calidad”.

Alvar Ocano, Gerente Médico de Aegon.

La salud ambiental se relaciona con todos los elementos físicos, químicos y biológicos externos a una persona que inciden en su salud, sirviendo de indicadores para la prevención y la creación de ambientes propicios para una adecuada salud humana. En este sentido, según indica gerencia médica de Aegon, el cambio climático no crea nuevas enfermedades, las amplifica y redistribuye geográficamente.

¿Dónde se encuentran los factores ambientales que influyen en la salud?

  • En el aire

A pesar de que el aire es vital para la vida humana, la OMS calcula que 9 de cada 10 personas respiran aire contaminado. El dióxido de nitrógeno, el ozono troposférico y el dióxido de azufre, entre otros, son los principales agentes contaminantes que contiene el aire. La contaminación atmosférica es el mayor riesgo medioambiental en Europa, generando casi medio millón de muertes prematuras cada año.

Este tipo de agentes tienen su origen en el tráfico de las ciudades, las calefacciones, las industrias, refinerías o incineradoras, o incluso la quema de basura.

  • En el agua

La contaminación también llega al agua, provocando más de 500.000 muertes al año en todo el mundo. Entre los principales efectos que puede provocar están la diarrea y la transmisión de enfermedades como el cólera, la distería, la fiebre tifoidea y la poliomielitis. Las bacterias, virus, parásitos, fertilizantes, pesticidas, fármacos, nitratos, fosfatos, plásticos, desechos fecales y hasta sustancias radiactivas pueden estar presentes en el agua y contaminarla.

Estos elementos no siempre tiñen el agua, por lo que no siempre podremos detectar esta contaminación a simple vista.

  • En los alimentos

El medioambiente influye tanto en la cantidad como en la calidad de los alimentos que consumimos. La climatología de la zona, el suelo, o incluido la latitud y la latitud determinan el tipo de alimento que se produce y se consume en cada región.

En este sentido, las bacterias son la principal fuente de contaminación medioambiental de los alimentos, además de metales pesados y otras sustancias químicas. Algunas de las bacterias más frecuentes son la Salmonella, la E. coli o la Listeria.

El cambio en el uso del suelo, la sobreexplotación de los recursos naturales, la deforestación, la alteración de la calidad del agua potable, la generación de gases de efecto invernadero y el consiguiente cambio climático, la contaminación y la propagación de especies invasoras son actividades humanas con efectos graves para la naturaleza, el planeta y la salud de las personas.

Tomar medidas para cuidar los ecosistemas y la biodiversidad es la única opción para conseguir un planeta sostenible. El medio ambiente y la salud humana dependen de ello.