Las residencias de Sanitas ponen en marcha un programa integral de rehabilitación post COVID-19

Redacción ‘MS’- La COVID-19 ha dejado secuelas en muchas de las personas que lo han sufrido, pero también en aquellos que sin haberlo pasado se han encontrado en confinamiento y aislamiento. La falta de movimiento y ejercicio físico ha afectado de forma directa a la población mayor tanto a nivel físico como emocional. Por ello, los expertos en el cuidado de personas mayores de Sanitas han diseñado un programa integral de rehabilitación post COVID-19. Así lo explica la aseguradora a través de un reciente comunicado.

Los mayores, tras el confinamiento y el aislamiento vivido, necesitan recuperar masa muscular, fuerza y equilibrio sin dejar de lado la mente, la cual necesita reactivarse. Con este producto Sanitas Mayores permite a las personas que viven en residencias, centros de día o aquellos que tienen contratado el servicio a domicilio Sanitas En casa contigo acceder a este producto que tiene como objetivo minimizar los efectos directos del COVID-19, mejorar la capacidad física y mental, para reducir así el riesgo de caídas y, directamente el riesgo de fracturas, además de minimizar la posibilidad de sufrir ictus y de la pérdida de capacidades cognitivas.

El programa tiene una duración de 4 meses con 8 sesiones semanales que se valoran según las necesidades de la persona. Se tratan de cuidados integrales realizados por un equipo multidisciplinar que incluye numerosos cuidados.

Entre ellos se encuentran: cuidados diarios de enfermería y servicio médico geriátrico post COVID-19 dirigido a los mayores que han sufrido la enfermedad y mantienen alguna secuela; neuropsicología y psicología individual que tiene como objetivo recuperar o mantener las funciones cognitivas; terapia ocupacional, para minimizar el impacto de la enfermedad y el ingreso sobre las capacidades físicas, cognitivas, sensoriales y emocionales del paciente; fisioterapia individual adaptada a la persona para la mejora de la masa muscular, y rehabilitación respiratoria para el aumento de la capacidad pulmonar; trabajo social con ayuda a domicilio y teleasistencia; y un seguimiento y plan de cuidados, una vez recuperado el mayor se prepara una guía para el mantenimiento de la recuperación.

Sanitas Mayores recuerda que es importante no perder el foco en todos los cuidados de carácter psicosocial y centrados en la persona que se realizan en los centros y que están dirigidos al bienestar físico y emocional de los residentes, y que se encuentran diseñados para mantener la mejor calidad de vida de todos ellos.

“En Sanitas Mayores creemos que tras la COVID-19 hay que trabajar mucho a nivel físico y emocional, a pesar de haber mantenido las terapias de forma individualizada en los peores momentos del confinamiento y aislamiento, la pandemia ha tenido secuelas en todos los ciudadanos, pero muy especialmente en este sector donde el ejercicio físico y mental es tan importante”.

David Curto, director médico de Calidad e Innovación de Sanitas Mayores.

Las residencias de Sanitas han reforzado sus equipos y aumentado las capacidades asistenciales que ofrecían de forma previa a la crisis. En este sentido, los centros residenciales de Sanitas ya contaban antes del COVID con enfermería y médico presencial, además en junio la compañía incrementó la atención médica a través de videoconsulta con 15 especialidades y urgencias 24 horas, con el objetivo de proteger y aumentar la seguridad clínica.

En la actualidad, todos los centros de Sanitas están libres de COVID-19 con todos los residentes y empleados vacunados, además se mantienen muchas medidas de seguridad. Las residencias vuelven a la normalidad de forma paulatina con las visitas y salidas de los residentes, y la vuelta de las actividades terapéuticas y de ocio.