María Amparo Cabaleiro, Directora de Siniestros de Reaseguros y Grandes Cuentas de ARAG, responde a nuestras preguntas.
¿Cuánto tiempo lleva trabajando en ARAG?
Desde el año 1989.
¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?
Siempre se ha desarrollado en Siniestros. Conozco todas sus facetas, desde la tramitación de las diferentes tipologías de productos, pólizas y siniestros hasta mi actual faceta de directora. Disfruto de todo ello, pero si tuviese que elegir una única cosa, me gusta buscar soluciones a problemas que a priori pueden resultar complejos y compartirlas para mejorar o alcanzar los objetivos y retos.
«Me gusta buscar soluciones a problemas que a priori pueden resultar complejos y compartirlas para mejorar o alcanzar los objetivos y retos».
¿Cómo va el área de operaciones a final de año?
Cumpliendo los objetivos marcados y, como viene siendo habitual año tras año, enfrentándonos a los cambios de los mercados y superando situaciones adversas, con profesionalidad y con bastantes dosis de creatividad, dinamismo, visión de futuro, etc.
¿Hay cambios significativos en los siniestros dependiendo de la época del año?
En general los siniestros no suelen descender. Las personas sufrimos estos problemas (accidentes tráfico, reclamaciones por lesiones, problemas en las comunidades, con los vecinos, con los proveedores, con los inquilinos, etc.) en cualquier mes del año. Por ejemplo, aunque haya una creencia generalizada de que en el verano hay menos siniestros de humedades, hay algo menos pero no porque no se produzcan sino porque los clientes y los mediadores están de vacaciones lo que afecta a que el flujo de siniestros se reduzca.
«En general los siniestros no suelen descender».
Un asegurado puede tener una póliza durante años y no utilizarla hasta años después. En ese momento entra en juego su trabajo. ¿Qué es lo más importante a la hora de tratar con el cliente?
La información, explicarle lo que vamos a hacer, que se sienta apoyado y correctamente asesorado
¿Y qué habilidades concretas debe tener alguien que trabaja en su área?
Capacidad de negociación para alcanzar acuerdos, no solo con la parte adversa, sino con el propio cliente. También creatividad para buscar soluciones adecuadas y rápidas para cada siniestro porque, aunque puede parecer que los siniestros del mismo tipo tienen soluciones similares, nada más lejos de la realidad. Los actores, los tiempos, las causas, los orígenes… son factores que hacen que siniestros con una misma tipología y con versiones similares (tráfico, humedades, etc.) sean muy distintos entre sí y requieran acciones diferentes.
«Es importante la creatividad para buscar soluciones adecuadas y rápidas para cada siniestro porque, aunque puede parecer que los siniestros del mismo tipo tienen soluciones similares, nada más lejos de la realidad»
¿Cómo debe ser un buen trámite de siniestros?
Desde el inicio hay que hacer una reclamación activa, aplicando los tempos adecuados y lógicos para que no se dilate su resolución. Mantener informado al cliente de las acciones a emprender y gestionar correctamente sus expectativas sobre el resultado o la posibilidad de la reclamación (si es viable o no) y el tiempo que tardará.
«Desde el inicio hay que hacer una reclamación activa, aplicando los tempos adecuados y lógicos para que no se dilate su resolución».
¿Qué cree que es lo más importante para motivar a su equipo?
Los buenos resultados y el trabajo bien hecho.
