Redacción ‘MS’- El mes de agosto está asociado a una palabra: vacaciones. Un momento deseado durante todo el año y donde la felicidad es máxima. Sin embargo, para la mayoría de nosotros, los días infinitos de planes, los presupuestos ajustados para los destinos deseados y la presión para que todo salga «perfecto» puede dejarnos cierta sensación de agobio impidiendo el disfrute pleno.
Para evitar una sensación agridulce y disfrutar al máximo de esos merecidos días de descanso, MetLife sugiere las claves definitivas para evitar el estrés vacacional.
Haz una lista de las cosas que debes hacer (y compruébala dos veces)
Escribe todo lo que deseas lograr en el transcurso de estos días, desde visitar aquellos lugares llenos de historias y comprar productos locales, descubrir diferentes playas o perderte en la montaña. Después, encuentra la forma de de eliminar el exceso de compromisos de tu agenda para evitar sobrecargarte. ¿Puedes decir sí a los dos o tres planes más importantes, en lugar de comprometerte con ir a todos y cada uno? Recuerda, menos es más y en vacaciones hay que descansar.
Marca tus fechas
Una vez tengas claras las actividades para estas vacaciones, dale a cada una un espacio en tu calendario. Saber que tienes tiempo para ir a la playa, pasear por el mercado o cocinar lo que más te apetezca te ayudará a sentirte más organizado a la vez que feliz. Si programar todo te abruma, deja algunos días libres para compromisos de última hora.
Prioriza el autocuidado
Es fácil olvidar hábitos saludables en esta época del año. Pero todo se trata de equilibrio: si sabes que vas a comer y cenar muchos días fuera, elige opciones de comidas más ligeras y saludables estés donde estés. Desde pescados a la brasa, ricas ensaladas y hasta, por que no, un buen marisco. Además, si tienes demasiados compromisos, intenta trasladar tu entrenamiento nocturno a la mañana o antes del almuerzo y si acudes a la playa, aprovéchala. Será tu gimnasio exterior favorito. Por supuesto, no debemos olvidar que , un poco de descanso y relajación no está de más, por lo que te recomendamos hacer algo reparador una vez a la semana, incluso si solo te acurrucas en el sofá con un buen libro durante una hora, será beneficioso.
Deja a un lado las diferencias
Si disfrutas de estos días con la familia, habrá momentos en los que no estés de acuerdo con tu cuñado, tu prima o incluso tu suegra, por lo que debes recordar que no hay por que participar en esas “tipicas” peleas familiares y lo importante, es disfrutar. Las vacaciones son para relajarse.
Disfruta los momentos irrepetibles
Otra buenísima opción y más, en los momentos en los que vivimos, es pasar una tarde como voluntario ayudando a recoger basuras de la playa o de la montaña o acogiendo a un niño que no pueda disfrutar de unos días de playa. No importa cuán agotado te sientas, hay muchas personas que están lidiando con algo mucho peor. Sentir que ayudas, sea cual sea la causa, puede hacer una diferencia significativa y pone tus propios problemas en perspectiva.
Por último, no te obsesiones con las “vacaciones perfectas». Las cosas no siempre irán según lo planeado pero lo importante, es saber disfrutar del momento. Cuídate, cuida a los tuyos y disfruta de lo realmente importante.
