Pilar González de Frutos (UNESPA): «2021 ha sido el año de la resiliencia y también de la mirada periférica»

‘Muy Segura’ entrevista a Pilar González de Frutos, presidenta de UNESPA.

Al igual que le preguntábamos el año pasado, un año después, ¿cómo define este 2021 que ya estamos dejando atrás?

Si 2020 fue el año de la incertidumbre y el miedo, 2021 ha sido el año de la resiliencia y también de la mirada periférica. Le explico por qué. Por un lado, hemos tenido que seguir trabajando para hacer frente a nuestro principal problema, como ha sido la COVID-19 y las consecuencias sanitarias y económicas que esta pandemia ha supuesto. Por otro lado, sin perder el foco en esta cuestión, hemos tenido que volver la mirada hacia todas esas cuestiones también importantes que la pandemia paralizó o dejó en un segundo lugar, como la sostenibilidad y su nueva regulación, la digitalización, los retos de la nueva movilidad o, incluso, cuestiones a priori de menor calado pero igualmente importantes para el sector, como la educación financiera.    

«Hemos tenido que volver la mirada hacia todas esas cuestiones también importantes que la pandemia paralizó o dejó en un segundo lugar, como la sostenibilidad y su nueva regulación, la digitalización, los retos de la nueva movilidad o la educación financiera».

¿Cuáles son los retos más destacados que considera ha debido afrontar el sector?

Como no podía ser de otra manera, el principal reto de este año ha estado vinculado a la COVID-19. Este ejercicio hemos centrado nuestros esfuerzos en recuperar el tono anterior a 2020 y lo hemos conseguido en muchos aspectos. Los ingresos de las aseguradoras por primas a cierre de septiembre se situaron en 44.890 millones de euros, un 4,10% más que un año atrás. Sin embargo, si comparamos los datos con los primeros nueve meses de 2019, el negocio es todavía un 7,39% menor. Por lo tanto, el seguro da señales de recuperación, pero todavía no ha cubierto todo el terreno perdido.

Por otro lado, como he mencionado anteriormente, 2021 ha sido un año de mirada periférica y por ello hemos tenido que abordar también muchas otras cuestiones más allá de la recuperación del negocio. En este ejercicio hemos tenido que asumir, por ejemplo, las amplias novedades normativas europeas en materia de sostenibilidad. Las nuevas obligaciones afectan tanto a la organización interna de la gran mayoría de las entidades financieras, como a la información que las mismas deben de publicar en su página web y en la información precontractual de sus productos. Esto, sin duda, supone un importante reto de actualización y revisión de procesos en el que todavía estamos inmersos. La revisión de solvencia II y la necesidad de comenzar a adaptarse a las nuevas normas de contabilidad son materias a las que hemos dedicado mucho tiempo en 2021 y seguiremos haciéndolo en el próximo año.

«En este ejercicio hemos tenido que asumir, por ejemplo, las amplias novedades normativas europeas en materia de sostenibilidad. Las nuevas obligaciones afectan tanto a la organización interna de la gran mayoría de las entidades financieras, como a la información que las mismas deben de publicar en su página web y en la información precontractual de sus productos».

¿En qué desafíos pendientes y/o en marcha es preciso mejorar? ¿Por qué?

Como es habitual en nuestro sector, los retos en el arranque de un nuevo año son de dos tipos. Por un lado, aquellas cuestiones que vienen de la mano de la coyuntura económica y social del momento. En este sentido destaca especialmente el repunte inflacionario que está marcando este final de año y que seguirá siendo una cuestión crucial en el arranque de 2022. Afrontar los problemas derivados de tener la tasa de inflación más elevada de las últimas tres décadas, será un desafío prioritario.

Por otro lado, están los grandes retos que nos marcamos en nuestra hoja de ruta y que deben afrontarse para que el sector siga creciendo. Aquí encontramos cuestiones como la transparencia, un objetivo que solo podremos cumplir si nuestras propuestas van acompañadas de una reducción de las trabas regulatorias y el excesivo rigorismo formal que marca la legislación actual. La sostenibilidad y los nuevos tipos de aseguramiento que nacen ligados a ella, serán otros de nuestros desafíos el próximo año, con retos como el seguro obligatorio para vehículos de movilidad personal. Como es evidente, también trabajaremos este año en todas aquellas cuestiones vinculadas al impulso de la previsión social complementaria, incluyendo entre ellas aquellas que tienen que ver con la propuesta del Gobierno de desarrollo de los fondos de pensiones de empleo de promoción pública. Ciertamente, 2022 será un año de mucho trabajo e importantes desafíos en el sector asegurador.

«Cuestiones como la transparencia constituyen un objetivo que solo podremos cumplir si nuestras propuestas van acompañadas de una reducción de las trabas regulatorias y el excesivo rigorismo formal que marca la legislación actual».

Destacando algunas de las acciones más importantes que viene reforzando UNESPA a lo largo de este ejercicio, ¿puede ofrecernos su opinión y reflexiones acerca de…

  • …el tratamiento de los instrumentos de ahorro individuales de previsión social y complementaria? Si algo nos ha enseñado esta pandemia que todavía estamos viviendo es la importancia de la prevención, de estar preparados para lo que pueda ocurrir en el futuro. De esto sabemos mucho en el seguro, donde gran parte de nuestro trabajo consiste en “guardar para mañana”. La previsión social debe ser, por lo tanto, una prioridad en nuestra sociedad y deben ponerse en marcha tantas medidas como sean posibles para instrumentar y facilitar el ahorro. Lo que carece de lógica es actuar en el sentido opuesto, impulsando iniciativas que actúen en detrimento del ahorro individual. La rebaja de 2.000 euros a 1.500 euros de los límites anuales de aportación a sistemas de previsión social individuales anunciada por el Gobierno, afectará a más de 7,5 millones de partícipes en Planes de Pensiones individuales y casi 1 millón de asegurados en Planes de Previsión asegurados (PPA). En lugar de mirarnos en el espejo de nuestros países vecinos, que realizan una clara apuesta por estimular tanto el ahorro individual como el colectivo, tomamos el camino equivocado olvidando que ahora mismo debemos sumar, y no restar, iniciativas que nos ayuden a tener un futuro más seguro.

«La rebaja de 2.000 euros a 1.500 euros de los límites anuales de aportación a sistemas de previsión social individuales anunciada por el Gobierno, afectará a más de 7,5 millones de partícipes en Planes de Pensiones individuales y casi 1 millón de asegurados en Planes de Previsión asegurados (PPA)».

  • ….la Alianza para la FP Dual de cara a atraer talento al sector seguros? El proyecto de la Formación Profesional Dual especializada en seguros es una inversión de futuro que ya ha empezado a dar sus frutos. A través de la colaboración del sector con las Administraciones autonómicas de educación, tanto en Cataluña como en Madrid, es posible ya estudiar un Grado Superior de Administración y Finanzas especializado en seguros, compaginando la formación en el centro educativo y en empresas del sector. Los índices de inserción laboral de los jóvenes que han cursado esta formación hasta el momento, oscila según el año entre 60% y el 85%, nos indican que este proyecto es lo que los ingleses llamarían un win-win, porque aquí, ganamos todos. En el sector estamos disfrutando de la incorporación de savia nueva, especializada en nuestro campo, formada en nuestras empresas y con muchas ganas de crecer dentro de esta industria. Mientras, estamos ayudando a combatir uno de los principales problemas de España a nivel laboral, una tasa de paro juvenil que ronda el 40%. En el próximo año el sector afronta el reto de consolidar la expansión territorial de la iniciativa.

«En el sector estamos disfrutando de la incorporación de savia nueva, especializada en nuestro campo, formada en nuestras empresas y con muchas ganas de crecer dentro de esta industria».

  • …los desastres naturales y el lanzamiento reciente de una Guía para solicitar la indemnización tras un desastre natural? En el sector asegurador debemos estar siempre atentos a los indicadores que nos avanzan qué puede ocurrir en el futuro y así, prevenirnos ante lo que está por llegar. En el caso de los desastres naturales, sin embargo, no hablamos de indicios sino de evidencias y no se trata de futuro sino de presente. Es innegable que los fenómenos naturales adversos son cada vez más frecuentes, más dañinos y con afectaciones en una mayor extensión territorial. Por fortuna, en España contamos con un sistema sólido de atención a estos daños, instrumentado a través de las aseguradoras, el Consorcio de Compensación de Seguros y Agroseguro. Sin embargo, mucha gente desconoce de la existencia de este sistema, la protección que ofrece y el papel que cada entidad u organismo desarrolla frente a estos acontecimientos. En la página web Naturalmente Protegidos, que hemos puesto en marcha en 2021, explicamos a los asegurados quién les protege y cómo solicitar las indemnizaciones correspondientes. La información es imprescindible para atajar la incertidumbre y el miedo que sufren quienes viven en primera persona los efectos de estos fenómenos adversos de la naturaleza.

«Es innegable que los fenómenos naturales adversos son cada vez más frecuentes, más dañinos y con afectaciones en una mayor extensión territorial».

  • …la donación de 107 aseguradoras de 3,8 millones de euros a Cáritas para la financiación de cuatro proyectos muy destacados? Entre los muchos aprendizajes que la pandemia dejará en nuestras vidas, uno de los más importantes es que ha quedado demostrado que juntos, podemos lograr grandes cosas. En el sector asegurador lo hemos comprobado a través del Fondo Solidario que ha reunido cerca de 38 millones de euros gracias a las aportaciones de 107 aseguradoras. Con este fondo, hemos podido ofrecer un seguro de vida gratuito a empleados de centros sanitarios y residencias, así como realizar donaciones solidarias a diferentes ONG e instituciones del ámbito científico. En concreto, sobre la donación a Cáritas, una de las cosas que más nos gusta es que permitirá abordar de forma holística las consecuencias sociales y económicas de la crisis causada por la COVID-19. El dinero que ha recibido esta organización se destinará a cuatro proyectos muy diferentes. Por un lado, este fondo solidario dotará de bienes de primera necesidad a familias en situación de exclusión social, así como les ayudará en el pago de suministros domésticos y alquileres. Por otro lado, se impulsarán acciones de refuerzo educativo a menores de edad, se realizará un acompañamiento a mayores en situación de vulnerabilidad y se apoyará a los programas de empleo desarrollados por Cáritas en los que participan cada año más de 60.000 personas.

«Sobre la donación a Cáritas, una de las cosas que más nos gusta es que permitirá abordar de forma holística las consecuencias sociales y económicas de la crisis causada por la COVID-19».

¿Cómo observa la evolución que está experimentando el papel de la mujer dentro del mercado de seguros? ¿Qué estrategias, medidas y acciones cree que es preciso seguir mejorando y/o reforzando y con qué objetivo prioritario?

Sinceramente creo que podemos estar orgullosas del salto cualitativo que se ha producido en el sector asegurador en lo que a la posición de la mujer se refiere. Los datos, hablan por sí solos. Hace 30 años, el 85% del empleo femenino en seguros era personal administrativo y subalterno. Hoy, las administrativas son solo el 8% de todas las mujeres que trabajan en aseguradoras. El mayor componente, un 28% de todas las mujeres que trabajan en entidades, son las técnicas. Es decir, son profesionales que se encuentran en la sala de máquinas del negocio. Otros datos sobre los que creo que es interesante poner el foco son los puestos de responsabilidad que ocupan cada vez más en departamentos diferentes. Las mujeres representan el 64% de las personas con responsabilidades directivas en los departamentos de recursos humanos de las entidades, ostentan el 60% de los puestos directivos en departamentos de Cumplimiento Normativo (Compliance) y Legal, y reúnen cerca de la mitad de los puestos de mando en Atención al cliente.

Los datos, como digo, son positivos pero, evidentemente, aún queda camino por recorrer y contamos con elementos que pueden acelerar este proceso. Estoy convencida, por ejemplo, de que la simbiosis progresiva entre personas y tecnología jugará a favor de las mujeres. Los trabajos creativos ganarán cada vez más peso y esta es una oportunidad que las mujeres deben aprovechar. El cambio hacia modelos operativos en entornos más ágiles y flexibles, además, también dejará más espacio para la conciliación, algo que las mujeres valoramos mucho en el entorno laboral.

«Sinceramente, creo que podemos estar orgullosas del salto cualitativo que se ha producido en el sector asegurador en lo que a la posición de la mujer se refiere».

Este contexto debe ayudarnos a mejorar los datos que todavía tenemos pendientes, como el incremento de la presencia femenina en los departamentos ligados a las tecnologías de la información, donde todavía sólo representan el 28% del personal. Este objetivo nos recuerda que el trabajo en pro de la igualdad debe ser del conjunto de la sociedad ya que, para que lleguen mujeres a los departamentos de tecnología, primero debemos llenar de mujeres las facultades de titulaciones científicas y tecnológicas. La mujer debe apostar por las llamadas disciplinas STEM (Scientific, Technologic, Engineering and Mathematics, en inglés).

«El trabajo en pro de la igualdad debe ser del conjunto de la sociedad ya que, para que lleguen mujeres a los departamentos de tecnología, primero debemos llenar de mujeres las facultades de titulaciones científicas y tecnológicas».

Tras la reciente firma del nuevo convenio colectivo para aseguradoras, mutualidades y mutuas colaboradoras con la Seguridad Social, ¿qué avances más significativos considera que incluye en materia de igualdad y corresponsabilidad?

El convenio para el período 2020-2024 en el sector asegurador apuesta claramente por la sostenibilidad en el sentido más amplio de la palabra, es decir, abarcando todas las iniciativas posibles bajo el paraguas de los principios ASG (Ambientales, Sociales y de Buen Gobierno). En este sentido, introduce significativos avances en materia de igualdad y corresponsabilidad en las situaciones familiares. Uno de los avances más destacados es el que busca favorecer que la mujer pueda compatibilizar el trabajo con una buena salud durante el embarazo, por lo que tendrá derecho a una reducción retribuida del 25% de su jornada laboral a partir de la semana 30 de gestación. Además, se impulsan medidas que favorecen la corresponsabilidad, ofreciendo un permiso retribuido por el tiempo necesario para que el padre o la madre no gestante pueda acudir a los cursos de preparación al parto a partir del sexto mes de gestación y hasta un máximo de 10 horas.

Otras medidas de las que nos sentimos muy orgullos como sector son aquellas con las que se busca dar apoyo a las víctimas de violencia de género. Las trabajadoras que se vean en esta situación podrán solicitar una ayuda económica de hasta 1.000 euros para hacer frente a gastos de traslado de domicilio, asistencia jurídica o ayuda psicológica. Igualmente, dispondrán de permisos retribuidos para comparecer por el tiempo que fuese necesario ante los órganos judiciales y administrativos. Todo ello tiene el objetivo de hacer que el entorno laboral sea un apoyo más de la mujer en situación de vulnerabilidad.

«Otras medidas de las que nos sentimos muy orgullos como sector son aquellas con las que se busca dar apoyo a las víctimas de violencia de género».

¿Cuál es su deseo navideño y de cara a 2022?

El deseo navideño para este año, por supuesto, es que estas sean las últimas navidades que debamos vivir pendientes de los índices de contagios, de la presión hospitalaria y de los repuntes. Si el año pasado hacía un llamamiento a la prevención, creo que en esta ocasión el deseo es que aprendamos de todo lo que hemos hecho bien hasta el momento para afianzar los pasos que hemos logrado dar. No hay retroceso que valga, las estadísticas nos dicen que la vacunación funciona y que podemos mantener el virus a raya si seguimos manteniendo las medidas de seguridad correspondientes.

Seamos cautos, demos ejemplo y consigamos que 2022 sea por fin el año de la vuelta a la normalidad. Hay muchos ámbitos en los que debemos seguir trabajando y dejar de lado la pandemia será la única forma de poder hacerlo con todos los medios necesarios.

«Si el año pasado hacía un llamamiento a la prevención, creo que en esta ocasión el deseo es que aprendamos de todo lo que hemos hecho bien hasta el momento para afianzar los pasos que hemos logrado dar».