Remedios Martínez (PSD Security): «El éxito pasa por trabajar en equipo, aceptando que solo cometiendo errores crecemos»

La Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid, ASEME, colabora en esta sección con ‘Muy Segura’ con el objetivo de dar a conocer a nuestra audiencia los diversos y valiosos perfiles de sus empresarias que constituyen, sin duda, un claro ejemplo para tod@s nosotr@s.

Este mes entrevistamos a Remedios Martínez Villafranca, CEO de PSD Security.

¿Cómo fueron los inicios de su andadura profesional? ¿Cuál es el mejor recuerdo que conserva de aquella primera etapa, y qué momento le implicó un mayor reto o desafío?

Mi andadura  profesional comienza cursando aún la licenciatura en Administración y Dirección de Empresas, que, junto con mi especialización en auditoría en la Universidad Complutense de Madrid, CUNEF, me permitió en verano hacer prácticas en el Banco Central de Londres, así como otras experiencias profesionales relacionadas con mi grado universitario. Pero fue en el Banco de Santander, en su Corporación Financiera, Hispamer Servicios Financieros, donde inicié mi desarrollo profesional y personal de profundo calado. Sólo estuve tres años, pero fue un período vital porque en ellos confluyeron la exigencia que requería el  Departamento de Impuestos  y el de Consolidación, donde era la encargada de realizar los informes para la Central de Balances del Banco de España, junto con la creación de mi familia y el nacimiento de mi hija.

Si vuelvo la vista atrás, en este período adquirí el sentimiento de orgullo de pertenencia a una magnífica empresa a la que tengo especial cariño porque ha formado parte de mi vida desde mi nacimiento. En ella desarrollé la búsqueda de la excelencia profesional junto con la necesidad de conciliación y diversificación de objetivos, que me han acompañado ya desde entonces.

Durante este período, cursé además un MBA en Derecho Financiero, organizado por el  Centro de Estudios Financieros de Madrid y un día me llamaron de IBM convirtiéndose en la multinacional que más me ha marcado profesionalmente.

Hasta la fecha, ¿qué hitos considera que han acontecido para usted en el transcurso de su recorrido laboral y por qué han tenido ese significado? ¿Qué enseñanza cree que le ha aportado cada etapa?

Tres han sido los hitos más importantes en mi trayectoria profesional.  

IBM. Cuando comenzaba a desarrollar mi carrera profesional en el Banco de Santander me llamaron para una multinacional norteamericana de tecnología, para formar parte de un proyecto cuyo objetivo era adaptar todos los procesos de gestión interno de su Establecimiento Financiero de crédito a las circulares del Banco de España. Enseguida me hicieron Proyect Manager dirigiendo a más de cuarenta personas en diferentes países, lo que me obligó a convertir el inglés en mi idioma vehicular.  

Tras este proyecto tuve un reconocimiento mundial, recibí un premio de IBM Corporate y pasé a ser nombrada directora Financiera del Establecimiento Financiero  de Crédito y directora Financiera de IBM Global Financing para España y Portugal, que es la división de financiación. Con posterioridad adquirí la responsabilidad del área Financiera de Bussines Partner y de diversas áreas de Bussines Controls en España, Portugal, Grecia e Israel Durante 18 años aprendí a trabajar en una multinacional en contacto directo con personas de múltiples países, en un contexto intercultural con diferentes religiones, razas, sexos, tendencias… Fueron unos años que me hicieron crecer como profesional y como persona. Lo que me llevó a hacerme una IBMer de corazón:  por la profesionalidad, el compañerismo y la cultura que tiene esta empresa que me ha inculcado la exquisitez en la atención al cliente, la responsabilidad, el cuidado en la formación del personal, la conciliación y el teletrabajo.

Essino Global Chinese  Service. En este mismo período creo la empresa Essino Global Chinese  Service, en la que impartíamos clases de chino y traducción, fruto de un interés cultivado en mi entorno familiar por esta cultura y sociedad que empresarialmente es tan enriquecedora. Fue en este período de 4 años cuando interioricé el significado de tener socios, empleados, asumir riesgos patrimoniales propios y tener una visión global de los distintos departamentos de la empresa, con la responsabilidad que conlleva. Y este bagaje me llevó  a ser la Presidenta Ejecutiva de las Empresarias Chinas y Españolas AMECE, cargo que ostento en la actualidad.

PSD Security. En el 2019, en la antesala de la pandemia, asumo la responsabilidad de ser CEO de PSD Security, una empresa que fundé con mi socio hace 23 años, desarrollando un software de control de presencia, algo totalmente disruptivo y novedoso para la época. Con el transcurso de los años  se ha ido especializando en dar todo tipo de soluciones a las demandas actuales del mercado de la seguridad.

Mi aportación fundamental a PSD Security ha sido implementar servicios de valor añadido  a los clientes, para garantizarles la mejor solución adaptada a sus necesidades en ​asesoría de proyectos, ejecución, mantenimiento y soporte online. Dándoles una respuesta basada en la innovación, la  inmediatez y la integridad.

¿Cuándo y por qué nace PSD Security?

PSD Security nace en febrero de 1998 como una empresa de desarrollo de software, que ofrecía soluciones de presencia y control de producción. Durante estas más de dos décadas ha vivido tres momentos cruciales: La crisis del 2009, que propició la búsqueda de nuevas soluciones tecnológicas, que pasaran por la biometría, cuyas respuestas las encontramos en ZKTeco, convirtiéndonos en su partner exclusivo de distribución e instalación.  La entrada en vigor en marzo del 2019 del Real Decreto que obliga a todas las empresas a registrar la jornada laboral de cada trabajador, y ahí tuvimos que dar otro paso al frente, para dar cobertura a la gran demanda que aquello generaba. Fruto de ello hoy formo parte de la Junta Directiva del Consejo Español Regulador de la Jornada Horaria.

Y la crisis sanitaria global  que estamos atravesando y que nos ha obligado a ser ágiles dando respuesta a las necesidades sobrevenidas por la pandemia del COVID 19.    

¿Cuál es el posicionamiento de la compañía, así como su valor añadido en el mercado?

Es una empresa con 23 años de trayectoria en el sector del control de presencia, control de  accesos, cámaras de vigilancia, barreras, control de aforos, medición de temperatura y estamos bien posicionados en el mercado, con más de 5.000 instalaciones en España, Portugal e Hispanoamérica. Nuestro hecho diferencial es un servicio técnico en el que aportamos la excelencia en el trato del cliente. Nos precede un reconocimiento macerado por los años de trabajo con un equipo con una bajísima tasa de rotación, lo que les otorga un conocimiento excepcional del producto. A su vez seguimos incorporando talento para dar respuesta a las exigencias nuevas de este mercado.

Con los años, lo que he aprendido en todas las etapas de mi vida, es la importancia de aportar valor y  tener capacidad de resiliencia, intentando mejorar la vida de quienes me rodean, desde un punto de vista económico, intelectual y emocional, preocupándome de corazón por lo que les pasa a mis compañeros o  empleados. Siempre intento buscar que mi equipo se sienta valorado y que cada uno de ellos se consideren un eslabón imprescindible en el conjunto de la empresa.

Haber pasado por una multinacional como IBM y vivir en primera persona el nacimiento y desarrollo de una pyme como PSD Security, en mi entorno familiar, me ha permitido tener una visión caleidoscópica de la economía española y de las diferentes aportaciones que ofrece  cada uno desde el rol que desempeña. Esta multiplicidad de experiencias es la que me permite ponerme en la piel del que  tengo en frente. En los tiempos que corren el éxito pasa por trabajar en equipo aceptando que solo cometiendo errores crecemos. La clave está en superarlos y continuar.

¿De qué manera se han visto afectados por la irrupción de la pandemia sanitaria y qué acciones han implementado para adaptarse al nuevo contexto?

En estos dos años nos hemos dejado la piel para ofrecer soluciones de desinfección, medidores de calidad del aire, control de aforo, de temperatura corporal, lectores de código QR del pasaporte COVID… Si toda crisis es una oportunidad, la pandemia  sanitaria nos ha puesto a prueba y siento que estamos saliendo de ella con habilidades incorporadas y mira de alturas.

Durante las primeras semanas nos vimos sometidos a una vorágine de renovación de intendencia que nos impulsó a implantar una transformación digital que ya habíamos iniciado. De hecho, ha supuesto una oportunidad de negocio ya que muchas empresas empezaron a demandar procesos de control de presencia para el teletrabajo. Aunque nosotros teníamos mucho camino recorrido en este sentido, sí que  nos afectó en la capacidad de ofrecer servicios de instalaciones y envíos a nuestros clientes. No obstante, pasado el confinamiento total, empezamos  a comercializar  los software y  dispositivos de control de aforo, temperatura, higienización o los reconocimientos biométricos con mascarilla y toda esta marejada nos hizo que tuviéramos que buscar las nuevas soluciones que el mercado estaba demandando, adaptándonos al conocimiento tecnológico de las mismas.

Hemos trabajado muchísimo durante la pandemia, pero esta crisis nos ha obligado a parar en seco y reflexionar hacia donde tenemos que ir para dar respuestas a las necesidades venideras. Así como tomar decisiones en cuanto  a la evolución tecnológica y las estrategias empresariales que debemos acometer, para seguir ganando posicionamiento en un mercado altamente competitivo.

Mundo del seguro: ¿Cuál es su experiencia, tanto personal como profesional, con el mundo del seguro? ¿Y con el corredor de seguros concretamente? ¿Considera que esta figura profesional es lo suficientemente conocida y reconocida por el mercado? ¿Por qué?

Cuando no domino un tema, como es el del mundo del seguro, lo que siempre intento es rodearme de los mejores, para que me asesoren y me den la tranquilidad y todas las garantías que necesitas para adquirir un seguro de vida, médico o para proteger tu patrimonio o tu negocio.

En este sentido tengo una empresa que me da la garantía necesaria con un corredor de seguros muy capacitado, que actúa como intermediario defendiendo mis intereses con las compañías aseguradoras. Pero me sorprende que no sea un perfil más reconocido, quizás por desconocimiento o por los estigmas de mala praxis que han recaído en esta figura esencial para desarrollar un sistema de evaluación de riesgos, que permita dar soluciones a la medida, dependiendo del giro del negocio. Mucho más en el panorama tan dinámico en el que nos movemos.

Mujer: ¿Cuál es su visión acerca del nivel de visibilidad y el posicionamiento que posee la mujer profesional en nuestro país?

Por mi experiencia personal y profesional nunca he sentido esa discriminación porque tuve la suerte de criarme en una familia en la que la educación era fundamental y mis padres me inculcaron que tenía la misma capacidad y derecho de tener las mismas oportunidades profesionales que cualquier hombre.

Luego mi experiencia profesional en IBM siempre ha estado marcada por un liderazgo femenino ejercido por Amparo Moraleda y Marta  Martínez, así como grandes ejecutivas de ventas, financieras y tecnológicas. En esta empresa se ha cuidado muchísimo la igualdad desde el punto de vista de género, religioso o cultural, así como la conciliación. Pero no dejo de ser consciente de que era una burbuja adelantada al tiempo que dista mucho de las experiencias que han vivido otras mujeres, que han desarrollado su vida profesional en empresas locales o como autónomas.

De hecho, convertirme en CEO de PSD Security  me mostró otra realidad, porque  el mundo de la seguridad sí que está liderado y dirigido por hombres, donde la visibilidad de la mujer es casi inexistente. Aunque es cierto que es algo que está cambiando. Y como muestra, un botón.

En todo caso, a modo de reflexión, lo que sí puedo asegurar es que yo misma me tracé mi techo de cristal, limitando mi desarrollo profesional al rechazar, en ocasiones, ofertas laborales que requerían de una disponibilidad geográfica y horaria, que me dificultaba ocuparme de mi familia, como entendía que merecía.  Y es una experiencia que estoy segura que será compartida por muchas mujeres que les ha tocado decidir cómo conciliar su vida laboral y familiar, teniendo que hacer alguna renuncia en uno u otro lado de la balanza.

A modo de conclusión mi mirada es optimista. En nuestro país se ha evolucionado muchísimo desde los años 80 a nuestros días. Las mujeres están obteniendo la visibilidad que se merecen por muchos motivos, entre otros la apuesta institucional por la cultura de la conciliación y por el empuje de las nuevas generaciones. Un cambio que no sería posible sin el apoyo manifiesto o tácito de millones de padres, maridos, hermanos, amigos o compañeros que han sabido aceptar y han promovido el nuevo modelo de relación de género igualitario necesario en una sociedad desarrollada. Aunque siga existiendo techo de cristal, violencia de género o autolimitaciones y exigencias impuestas por mensajes que siguen calando en la concepción de qué es ser mujer, como lo de ser cuidadoras, complacientes, hermosas y hacendosas que tanto daño nos sigue haciendo, pero que también afecta a los roles establecidos para hombres, igualmente limitantes.

¿Qué valores definen para usted el liderazgo femenino?

La inclusión. Un liderazgo femenino no es excluyente ni con los hombres, ni con las diferentes orientaciones sexuales, credos o culturas. Ese es su gran valor. La paridad igualitaria no es posible sin las aportaciones de la sociedad en su conjunto.

Además de ese gran valor, creo que en el liderazgo femenino confluyen características desarrolladas durante milenios por las mujeres, que definen rasgos específicos como la sociabilidad. Somos más expresivas y cercanas. Tendemos redes de cooperación, que hemos aprendido de las habilidades de nuestras madres y abuelas, generando una empatía de la que se nutre la marca. Creo sin fisuras que el principal potencial de una empresa está en su equipo y para ello debes rodearte de talento y de bondad, una característica de la que se habla poco en el sector empresarial. 

Poseemos la capacidad de dibujar escenarios muy diferentes, con actuaciones diametralmente distintas, y ahí es donde tenemos la oportunidad de decidir, y marcar la diferencia, no solo apostando por una propuesta de valor económico, sino sociocultural,  dando respuestas más disruptivas e imaginativas. Y sobre todo la cooperación y la conciliación. Esos serían los valores que definen el liderazgo femenino: inclusión, cooperación, conciliación, comunicación e innovación.

Y en el mío personal, creo que añadiría el valor de la persuasión.

¿Desea lanzar un mensaje a la mujer profesional, que constituye un segmento muy destacado de la audiencia de Muy Segura?

Cuando se nos ha permitido conquistar espacios históricamente reservados a los hombres, las mujeres profesionales hemos demostrado tener además de  habilidades competenciales en nuestra área de formación, las denominadas habilidades blandas para gestionar procesos de cambio, tolerar incertidumbres e implementar políticas de conciliación, que consiguen equipos más cohesionados y satisfechos con su vida laboral y profesional, lo que repercute directamente en el balance de resultados. Por ello somos muchas las empresarias que desde los puestos de dirección seleccionamos a ejecutivas, apostando por un liderazgo femenino que va de la mano incuestionablemente con la coexistencia de ambos sexos que se nutren y complementan.

¿Quiere añadir algún comentario o reflexión adicional?

Sí. La solución de todo pasa por la cooperación, compartiendo conocimientos, recursos y habilidades. Estoy convencida que en esta 4ª Revolución Industrial en la que la innovación tecnológica, la  inteligencia artificial y   la interconexión de dispositivos y objetos a través de una red (IoT) se impone a un ritmo vertiginoso, la aportación fundamental y diferencial de la inteligencia humana es la capacidad de cooperar, cohesionar, generar adhesión a proyectos e ideas y de pensar globalmente con aplicaciones locales. Nuestra fortaleza hoy en día, más que nunca es lo que nos humaniza, la necesidad de comunicarnos, entendernos y ayudarnos mutuamente, sin distinción de sexo, raza, credo o cultura, para seguir evolucionando como personas y sociedad.