Anona Ochoa-Lácar (Bracket 360): «Es principal ser perseverante y tener confianza en una misma»

La Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid, ASEME, colabora en esta sección con ‘Muy Segura’ con el objetivo de dar a conocer a nuestra audiencia los diversos y valiosos perfiles de sus empresarias que constituyen, sin duda, un claro ejemplo para tod@s nosotr@s.

Este mes entrevistamos a Anona Ochoa-Lácar Monterde. Fundadora Bracket 360, Premio a la Empresaria PYME del año 2021.

¿Cómo inició su andadura laboral?

Tras terminar mis estudios en Madrid, volví a Pamplona y me incorporé a trabajar en banca. Aquí tuve un gran aprendizaje en todo lo que concierne al mundo laboral y funcionamiento dentro de la banca como trabajadora de una empresa. Pero mi pensamiento siempre estaba en que tenía que hacer algo más, quería crear algo desde cero (y quería ser mi propia jefa).

Tengo la suerte de provenir de una saga de emprendedoras, ya que mi bisabuela doña Concepción Lácar fundó en 1912 una empresa en Navarra que cuenta actualmente con más de 100 años de antigüedad y que a día de hoy sigue perteneciendo a mi familia y en los últimos años vuelve a ser dirigida por una mujer (mi hermana).

Por eso, tras unos años trabajando en banca propuse a mi padre, quien dirigía por aquel entonces la empresa que había fundado mi bisabuela, que me buscara algún hueco y que me enseñara cómo llevar una empresa. Él fue quien en esos años realizó la transformación de la empresa y tuve la gran suerte de poder estar a su lado. Me enseñó todos los aspectos (buenos y no tan buenos) de gestionar una empresa y cómo llevarla a lo más alto posible. Esta experiencia me hizo desear todavía más emprender y me hizo ver entre muchas cosas una de las cuestiones más importantes de dirigir una empresa y es la de tener claro que somos una familia a la que debo cuidar y proteger, que las decisiones a tomar son importantísimas en todos los sentidos y esto siempre lo tengo muy presente en mi día a día.

En 2006 vuelvo a Madrid y ya en 2011 junto con un gran amigo ortodoncista decido fundar mi empresa.

«Tengo la suerte de provenir de una saga de emprendedoras, ya que mi bisabuela doña Concepción Lácar fundó en 1912 una empresa en Navarra que cuenta actualmente con más de 100 años de antigüedad y que a día de hoy sigue perteneciendo a mi familia y en los últimos años vuelve a ser dirigida por una mujer (mi hermana)».

¿Qué desafíos afrontó en sus primeros pasos?

Por aquellos años (2011) los costes de los productos de ortodoncia eran históricamente muy elevados y por tanto muy poco accesibles para todos los bolsillos. Además, había muy poca agilidad a la hora de realizar las compras de producto. A los ortodoncistas les ocupaba muchísimo tiempo realizar sus pedidos de clínica viendo inmensos catálogos para escoger los productos que necesitaban.

Nosotros desde el principio apostamos por introducir la venta online de nuestros productos. Fue sin duda un gran reto porque todavía en aquellos años las clínicas y doctores no utilizaban apenas recursos de internet para comprar su material diario, y nos costó un gran esfuerzo conseguir introducirles. Pero es cierto que en muy poco tiempo conseguimos satisfacer nuestra perspectiva,  haciéndoles ver la rapidez, comodidad y simplicidad que conseguía al realizar sus compras en una página web.

«Desde el principio apostamos por introducir la venta online de nuestros productos».

¿Podría seleccionar tres hitos acontecidos para usted en el transcurso de su recorrido profesional y contarnos qué enseñanza le han aportado?

A mi modo de ver, el sector en el que se sitúa Bracket 360 era, en mis comienzos, un sector todavía muy masculino. Ya en estos últimos años estoy viendo un gran crecimiento en la incorporación de la mujer en este sector, pero hace 10 años todos los depósitos dentales y casi todas las clínicas dentales estaban dirigidas por hombres. Tenías que trabajar muy duro y ser muy profesional para que te tomaran igual de en serio que a otros colegas hombres. Pero aprendí a perseverar, a no tener miedo ante nada y a tener claro que tienes que defender tus ideas le pese a quien le pese.

También fue muy importante en mi carrera, y tiene que ver con esto que cuento antes sobre mantener una idea en la que crees, el modelo de negocio que planteamos desde el principio. Antes de Bracket 360 no existía la venta online de material dental. En cierta forma revolucionamos el mercado, pero al principio había mucha gente que pensaba que nos equivocábamos y que íbamos a fracasar. La perseverancia, de nuevo, fue clave, porque sin ella, y sin la confianza en nuestra idea y en el equipo, quizás no habríamos llegado donde estamos hoy.

No puedo olvidar mis primeros años de la constitución de la empresa porque yo procedía de un sector que nada tenía que ver con la ortodoncia, por lo que para mí era total novedad. Tuve que aprenderlo todo, desde la visión práctica del funcionamiento técnico de cada producto, los sistemas que se utilizan según el tratamiento a realizar al paciente, tipos de clases según la situación en boca, dientes, paladar, etc. Aquí volví a darme cuenta de que la perseverancia y no salirme de la idea que quería es muy importante para llegar a donde he querido. Es principal ser perseverante y tener confianza en una misma.

«No puedo olvidar mis primeros años de la constitución de la empresa porque yo procedía de un sector que nada tenía que ver con la ortodoncia, por lo que para mí era total novedad».

¿Puede hablarnos de Bracket 360, su fundación y valor añadido en el mercado?

Bracket 360 tiene un objetivo claro, y es el de facilitar el trabajo en la clínica todos los días. Fue fundada no solo con el propósito de innovar en la forma de distribuir el material mediante el comercio online, como os comentaba, sino también, gracias a nuestra búsqueda constante de los mejores proveedores y al abaratamiento logístico que lo digital nos facilita, podemos ofrecer la mejor relación calidad-precio del mercado.

Por lo tanto, no solo hemos conseguido facilitar a los ortodoncistas el trabajo de realizar sus compras, sino también que puedan ofrecer accesibilidad a todos aquellos pacientes que quieren y necesitan un tratamiento de ortodoncia. 

Pero sin duda, si hay algo que nos define es nuestro empeño en hacerle a nuestros clientes la vida “más fácil”. Trabajamos para que el proceso de compra sea lo más directo y rápido posible, con una web muy intuitiva, para que no haya que dedicarle más tiempo del necesario, y puedan dedicárselo a lo verdaderamente importante: los pacientes.

«Si hay algo que nos define es nuestro empeño en hacerle a nuestros clientes la vida más fácil».

Algo de lo que me siento especialmente orgullosa es que Bracket 360 es una empresa en la que hemos conseguido en el ámbito laboral un gran desarrollo de la mujer. La Junta Directiva, por ejemplo, está formada al 100% por mujeres, y la plantilla también es mayoritariamente femenina. Contamos con un programa específico para la conciliación familiar para madres, con horario reducido y otros complementos. Damos mucha importancia a que nuestro equipo se encuentre a gusto en nuestra empresa. Creemos que es esencial para que puedan realizar sus tareas y se comprometan con la empresa eficientemente y vengan a trabajar con alegría.

A partir de este 2022 comenzaremos con la internacionalización, abriendo mercado y operando en diferentes países. Y por supuesto fijándonos como siempre en las nuevas tecnologías que vengan, en cuanto a la ortodoncia se refiere.

«Damos mucha importancia a que nuestro equipo se encuentre a gusto en nuestra empresa».

¿Qué significó para usted ser galardonada por ASEME en la edición de Premios 2021?

Qué voy a decir… Fue una sorpresa que no me la esperaba para nada. Fue un orgullo y alegría inmensa. Estoy muy agradecida por este reconocimiento a ASEME y a todo el jurado. Es algo que valoro muchísimo, me ha dado mucha energía para seguir al pie del cañón. Y pienso que ASEME es una buena aliada para dar visualización a las mujeres empresarias. Estamos en alza y ¡es algo muy importante!

«Pienso que ASEME es una buena aliada para dar visualización a las mujeres empresarias. Estamos en alza y ¡es algo muy importante!».

¿Cuándo y por qué surgió su vínculo con esta Asociación y qué le aporta en su día a día?

Había oído hablar de ella, pero por falta de tiempo no había investigado mucho. Fueron tanto mi directora general, como mi directora de comunicación, las que me hicieron la propuesta de presentarnos a los premios ASEME. Mi primera reacción fue “risas”, no podía creerme que me hicieran esta propuesta a mí. Una vez meditada la propuesta les dije que adelante. No tenía nada que perder, pero estaba convencida que mucho por ganar. No solo para mí, sino, y lo más importante para la empresa. Así que les dije que adelante y a por ello.

ASEME es una asociación muy necesaria para fomentar y visibilizar el trabajo de la mujer en la empresa. Estoy totalmente convencida de que somos tan importantes como los hombres en el ámbito empresarial y laboral. Aunque a veces tenemos que trabajar más para ganarnos méritos. Estoy segura de que, con este tipo de asociaciones, el trabajo independiente de nosotras mismas, etc. lo vamos a conseguir.

«ASEME es una asociación muy necesaria para fomentar y visibilizar el trabajo de la mujer en la empresa».

¿Desea lanzar un mensaje a la mujer profesional que desarrolla su actividad en diversos mercados y ámbitos de actuación, y que constituye una parte destacada de la audiencia de Muy Segura?

Simplemente, trabajar con ilusión, confianza y perseverancia en aquello que se quiera alcanzar.

¿Quiere añadir algún comentario o valoración adicional?

Para mí es muy importante reivindicar siempre el papel de las pymes y de las empresas familiares en la sociedad. Como comentaba antes, tengo la suerte de provenir de una saga de emprendedoras y me hace especial ilusión que mi hija sea desde hace unos años la directora general de Bracket 360, dando continuidad a esta empresa familiar.

También quiero reivindicar el papel de los equipos, y especialmente del mío, porque soy consciente de que es una de las partes más importante de la empresa y los empresarios no podemos olvidar nunca que sin nuestros equipos no seríamos nada.

«Los empresarios no podemos olvidar nunca que sin nuestros equipos no seríamos nada».