Sabrina Díaz (Coach Organizacional): «Creemos firmemente que las mujeres pueden alcanzar su máximo potencial, poniendo en valor la diversidad y la colaboración»

‘Muy Segura’ entrevista a Sabrina Díaz Ibarra, Abogada y Coach Organizacional con especialidad en Género.

¿Cómo inició su andadura profesional? ¿Qué momentos más gratificantes, y qué desafíos más importantes, considera vivió durante su primera etapa?

Yo tenía una carrera académica y profesional modélica a temprana edad: egresada con mención honorífica de la carrera de Derecho por la Universidad de Buenos Aires, trabajé en despachos de abogados prestigiosos en Argentina y España (donde cursé una maestría becada en la Pompeu Fabra) orientados al Derecho Corporativo. 

Sin embargo, no me sentía plena. Pese a que mi trayectoria profesional trazaba un camino prominente (con la proyección que tenía en aquel momento, el sendero natural era llegar a  ser partner de una firma jurídica de renombre), cada vez que llegaba a mi casa me replanteaba si ese era el camino profesional que realmente quería para mi. 

Al final, decidí dar un paso al costado y emprender la búsqueda de su propósito vital. Dejé una carrera corporativa con una gran perspectiva de plan de carrera, muy exitosa en términos académicos y organizacionales, pero gané la libertad de estar parada en lo que yo llamo mi ‘care’. ‘Care es lo que quiero cuidar. Yo siento que estoy cien por ciento todos los días de mi vida parada en mi care y ese es un impulso vital inagotable.

«Egresada con mención honorífica de la carrera de Derecho por la Universidad de Buenos Aires, trabajé en despachos de abogados prestigiosos en Argentina y España (donde cursé una maestría becada en la Pompeu Fabra) orientados al Derecho Corporativo». 

¿Qué hitos han acontecido para usted, hasta la fecha, en el transcurso de su recorrido laboral y por qué han tenido un significado especial?

Yo no quería ser coach (profesional), me formé para mí. Mucha gente llega a los programas no porque quieran trabajar de eso, sino por una búsqueda personal, una insatisfacción, algo que no les completa o no les termina de hacer sentido. Pero a partir de ahí, algo hizo click: me percaté que me gustaba aprender y ser el canal para que otros aprendan. Las personas que ayudamos a otras a aprender, tenemos un compromiso con el conocimiento, con la metodología. La academia no paga en términos económicos pero paga profundamente en un entendimiento tan amplio de lo que estás haciendo, porque te va nutriendo para poder nutrir a otros.

Tras ser madre, tuve un segundo entendimiento de la complejidad del mundo laboral, particularmente la realidad de las madres trabajadoras. Telecom, una de las compañías más grandes de Argentina, depositó su confianza en mi para implementar un programa de Maternity Coaching, el cual resultó todo un éxito. En latinoamérica se han pasado más de 1500 mujeres profesionales por el programa que diseñe tras la llegada de mi primer hijo en el 2013. 

Claudia Goldin, profesora de Harvard recibió el Premio Nobel de Economía en el 2023 tras demostrar con 30 años de investigación la brecha salarial de género que existe en USA. ¿Saben cuál es el punto de inflexión? casualmente, es la maternidad. La llegada del primer hijo, es el breaking point en la carrera de una mujer. 

«Tras ser madre, tuve un segundo entendimiento de la complejidad del mundo laboral, particularmente la realidad de las madres trabajadoras».

¿Puede contarnos en qué proyecto se encuentra inmersa en este momento en nuestro país?

Con más de 10 años de experiencia con empresas globales y mentoring de altos mandos, en el 2023 fundé en España SDI Business Coaching, una consultora con especialidad en género que se posiciona como un motor de cambio positivo en el mundo de los negocios. Con un enfoque innovador y mirada de género,  proponemos una visión estratégica en la manera de pensar los roles dentro de la empresa, y así transformar vidas y negocios.

«Con más de 10 años de experiencia con empresas globales y mentoring de altos mandos, en el 2023 fundé en España SDI Business Coaching».

¿En qué consiste?

Con un enfoque innovador y mirada de género, proponemos una visión estratégica en la manera de pensar los roles dentro de la empresa, y así transformar vidas y negocios.

¿A qué público se dirige?

SDI es un partner estratégico para las empresas del sector. Proponemos programas a medida de cada equipo y sus necesidades, con una mirada única y perspectiva de género enfocado en conseguir resultados tangibles. 

¿Cuáles son sus objetivos prioritarios y su hoja de ruta?

El objetivo es impulsar la carrera de las mujeres dentro de las organizaciones con acciones que realmente «mueven la aguja» y contribuyan de forma tangible en el cumplimiento de las metas de género de cada empresa. 

Se comienza por un «discovery» compuesto por entrevistas iniciales para conocer el camino recorrido hasta el momento, y poder sacar una foto diagnóstica de dónde estamos. El diseño y la implementación se realizan con indicadores que evidencien el avance del programa que estamos ejecutando. Necesitamos medir nuestros resultados, es la pauta ética de la propuesta de la consultora. 

«El objetivo es impulsar la carrera de las mujeres dentro de las organizaciones con acciones que realmente «mueven la aguja» y contribuyan de forma tangible en el cumplimiento de las metas de género de cada empresa».

Concretamente, ¿qué propósito tiene dentro de la industria aseguradora en España?

Creemos firmemente que las mujeres pueden alcanzar su máximo potencial, poniendo en valor la diversidad y la colaboración. Necesitamos generar acuerdos de convivencia que nos lleven a una comunidad más inclusiva, este propósito resuena en cada acción y servicio que propone SDI Business Coaching para la industria. 

¿Qué significa la igualdad para usted, desde el punto de vista práctico y efectivo? ¿Qué visión tiene acerca del modo en el que se desarrolla la igualdad en el mercado asegurador español?

Igualdad yo lo veo en términos de oportunidades. Desde una mirada empírica y del análisis todavía estamos a 132 años de cerrar lo que es conocido como «brecha de género». De manera simple, creo que todavía cargamos con modelos tradicionales sobre la maternidad y el cuidado familiar. La maternidad, en términos laborales, aún se concibe como si fuera un mundo incompatible. Cualquier mujer madre que quiera volver al trabajo siente por momentos “no tengo que estar aquí” porque culturalmente se espera que esté con su hijo. Y si está en su trabajo, “no está siendo una buena madre”. ¿Por qué esa mujer se siente en falta cuando lo que está haciendo es cumplir con su propósito de vida? Creo que es momento de actualizar los modelos y trabajar en una conciliación real que permita a las mujeres integrar sus roles. 

«De manera simple, creo que todavía cargamos con modelos tradicionales sobre la maternidad y el cuidado familiar».

¿Desea lanzar un mensaje a la mujer profesional que, desde distintos roles y áreas de ocupación, desarrolla su actividad en el sector seguros español, y constituye una parte muy destacada de la audiencia de Muy Segura?

¡Que levanten la mano! Necesitamos qu se paren en sus logros y se apropien de su  éxito. Es un fenómeno cross industrias, pero aquí juega un papel importante qué es el síndrome del impostor, un fenómeno psicológico muy común en mujeres. A pesar de tener logros evidentes y habilidades comprobadas, nos hace sentir una profunda sensación de no merecer nuestro éxito. El 75% lo experimenta al menos una vez en la vida (según un estudio de KPMG del 2023 realizado a 700 mujeres en oficinas de todo el mundo). Le atribuimos nuestros logros a la suerte o a factores externos, en lugar de reconocer nuestras propias capacidades y esfuerzos. En mi experiencia, para levantar la mano necesitamos tener metas claras pero, fundamentalmente, una base de autoconfianza. 

«El síndrome del impostor es un fenómeno psicológico muy común en mujeres».

¿Quiere añadir algún comentario o reflexión adicional?

Soy de las que cree que los primeros 21km de la maratón son responsabilidad y trabajo personal. Yo las llamo “jaulas personales”, condicionantes que una vez desbloqueados nos conectan con nuestro máximo potencial. También están las jaulas (barreras) organizacionales, como las sociales y culturales. Pero los primeros kilómetros los tenemos que hacer nosotras mismas, desafiando pensamientos limitantes, desarrollando una mentalidad de crecimiento y aprendizaje continuo, y poniendo foco en nuestras fortalezas, que son las que marcarán la diferencia. 

«Soy de las que cree que los primeros 21km de la maratón son responsabilidad y trabajo personal».