Sonia López (docente, psicopedagoga, formadora de familias): «Ojalá todos creyésemos firmemente que la educación es el arma más poderosa que existe»

‘Muy Segura’ entrevista a Sonia López, madre, maestra, psicopedagoga, formadora de familias, atleta, autora de su propio blog, colaboradora en el Club de Malas Madres y en De mamas & de papas (El País).

¿Cómo comenzó su andadura profesional?

Desde muy joven empecé a ser voluntaria en un centro de tiempo libro con niños y jóvenes en peligro de exclusión social. En aquel centro organizábamos actividades lúdicas y refuerzo escolar. Desde que inicié este voluntariado supe que quería dedicarme a la educación por todo lo que la experiencia me aportaba.

«Desde muy joven empecé a ser voluntaria en un centro de tiempo libro con niños y jóvenes en peligro de exclusión social».

¿Por qué se decantó por el mundo de la enseñanza?

Para mí ser docente es uno de los oficios más bonitos del mundo. Es una profesión que te hace desaprender a diario y te exige tu mejor versión. A la vez que aprenden mis alumnos ya también lo hago. Ellos me recuerdan a diario la necesidad de ver el mundo con ilusión y optimismo.

«Para mí ser docente es uno de los oficios más bonitos del mundo. Es una profesión que te hace desaprender a diario y te exige tu mejor versión».

¿Qué momentos de los atravesados hasta el momento dentro de su trayectoria, pueden ser considerados como hitos para usted? ¿Por qué?

A lo largo de mi carrera profesional he tenido el privilegio de trabajar en todas las etapas educativas. Desde educación infantil hasta la secundaria postobligatoria. En todas ellas he aprendido mucho en mi acompañamiento a niños y jóvenes, especialmente de los que muestran dificultades en el aprendizaje. Los años en los que trabajé en educación secundaria con jóvenes con alto riesgo social me ayudaron mucho a comprender qué necesitan los niños y jóvenes de los adultos que les acompañan.

«A lo largo de mi carrera profesional he tenido el privilegio de trabajar en todas las etapas educativas».

¿En qué responsabilidades está envuelta en la actualidad?

Hace ahora 12 años que compagino mi trabajo como tutora y coordinadora pedagógica en una escuela de primaria de mi ciudad, con la realización de charlas formativas a asociaciones de padres y colaboraciones con editoriales educativas.

Además, soy la creadora de Equilibrium http://sonialopeziglesias.blogspot.com/ un blog de temática educativa dirigido a familias y equipos docentes.

Soy una de las expertas de educación del Club de las Malasmadres y escribo en el periódico el País en su sección de familias.

Realizo asesoramientos familiares online.

«Hace ahora 12 años que compagino mi trabajo como tutora y coordinadora pedagógica en una escuela de primaria de mi ciudad, con la realización de charlas formativas a asociaciones de padres y colaboraciones con editoriales educativas».

¿Cómo define la nueva sociedad en la que estamos viviendo hace tan solo unos pocos meses, con el inicio de la pandemia sanitaria sin precedentes? ¿Cuáles detecta que están siendo los cambios más significativos y con una trascendencia mayor sobre las personas?

Sin duda, la pandemia nos ha hecho reflexionar sobre el ritmo desbocado en el que vivimos. Una sociedad que va demasiado deprisa y tiene poco tiempo de valorar lo que es realmente importante.

«Sin duda, la pandemia nos ha hecho reflexionar sobre el ritmo desbocado en el que vivimos».

¿De qué manera considera que están afectando al panorama de la educación?

Las mascarillas nos han robado las sonrisas, la distancia social el juego libre, los grupos estables de convivencia, la socialización. Vivimos un curso escolar ha teñido de incertidumbre, de tristeza y desolación.

La pandemia llegó para robarnos la magia de la enseñanza, para recordarnos nuevamente la torpeza de nuestros dirigentes al seguir considerando la educación como un gasto y no como una inversión. Para volver a demostrarnos que la infancia sigue siendo la gran olvidada de nuestro gobierno, para continuar engrandando la vulnerabilidad de la institución escolar.

Por suerte nuestros hijos y alumnos nos han vuelto a dar una gran lección y se han acostumbrado sin protestar a llevar mascarillas muchas horas al día, a las filas silenciosas, a los patios sin pelota y a los falsos grupos burbujas que respetan con resignación.

«Las mascarillas nos han robado las sonrisas, la distancia social el juego libre, los grupos estables de convivencia, la socialización».

¿Con qué herramientas contamos para adaptarnos a esta nueva realidad? ¿Cree que es posible enseñar a vivir (o a “sobrevivir”) ante este nuevo escenario? ¿Y aprender? ¿Qué es más fácil?

Nuestro trabajo en la escuela debe estar centrado en acoger las emociones y enseñar a gestionarlas, en dar respuesta a todas las dudas que les surgen a nuestros alumnos en un escenario tan excepcional. A ayudarles a ser resilientes, a creer en el futuro y a desarrollar las estrategias necesarias para hacer frente a este mundo tan cambiante.

«Nuestro trabajo en la escuela debe estar centrado en acoger las emociones y enseñar a gestionarlas, en dar respuesta a todas las dudas que les surgen a nuestros alumnos en un escenario tan excepcional».

Nos consta que es colaboradora del Club de Malas Madres? ¿Cuál es su aportación a esta plataforma y por qué?

Colaboro con el Club de las Malasmadres desde sus inicios. Un club que intenta desmitificar la maternidad y poner voz a la falta de conciliación que existe en nuestro país. Soy la experta en educación emocional, comunicación y duelo.

«Colaboro con el Club de las Malasmadres desde sus inicios».

Centrándonos en la mujer, que acapara un espacio muy importante dentro de Muy Segura: ¿cómo ve el posicionamiento actual de la mujer, en el panorama laboral y en la sociedad en general? ¿De qué manera considera que éste se está viendo afectado por la actual crisis?

Por desgracia, en la mayoría de los escenarios por los que me muevo, a la mujer sigue teniendo la necesidad de demostrar su valía o de justificar sus acciones. Esta crisis está castigando duramente a la mujer ya que muchas están teniendo que reducir sus jornadas laborales o renunciar a sus puestos de trabajo para poder conciliar.

«Por desgracia, en la mayoría de los escenarios por los que me muevo, a la mujer sigue teniendo la necesidad de demostrar su valía o de justificar sus acciones».

¿Desea lanzar un mensaje a nuestra audiencia?

Ojalá todos creyésemos firmemente que la educación es el arma más poderosa que existe.

¿Quiere añadir algún comentario o reflexión adicional?

Todos somos responsables del cambio, sólo necesitamos ser más empáticos para entender hacia dónde debe dirigirse.